Huesca

ACUERDOS MUNICIPALES

Asaja, Uaga y UPA se unen para alegar la ordenanza de purines

Las organizaciones agrarias muestran su desacuerdo por el límite del viento para aplicar purín

Asaja, Uaga y UPA se unen para alegar la ordenanza de purines
Asaja, Uaga y UPA se unen para alegar la ordenanza de purines
P.S.

HUESCA.- Asaja Huesca, Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (Uaga) y Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Aragón (UPA-Aragón) se han unido para tratar de cambiar el límite de uso de purines en función de la velocidad del viento, condicionado en la ordenanza municipal a los 15 kilómetros por hora. Las tres organizaciones agrarias presentaron el pasado viernes una alegación conjunta a este documento, que contempla multas de hasta 3.000 euros por su incumplimiento, en el registro del Ayuntamiento de Huesca referida al punto 5 de su artículo 5. En ella exigen que la velocidad para prohibir las aplicaciones se eleve hasta los 30 kilómetros por hora, para no "condicionar" tanto su trabajo.

Este punto ya despertó la indignación del sector cuando se presentó el primer borrador de la ordenanza hace unos meses ya que recoge, en concreto, la prohibición de la aplicación de estos fertilizantes "en las siguientes 48 horas que se pronostique según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) una velocidad de viento superior a 15 kilómetros por hora".

Cabe recordar que la ordenanza de purines fue aprobada en pleno por el Ayuntamiento de Huesca el pasado mes de noviembre y se sometió posteriormente a un periodo de exposición pública de 30 días, que concluyó el 6 de enero.

El texto fue aprobado por una amplia mayoría: PSOE, PP, Cs y Con Huesca votaron a favor, mientras que Vox se abstuvo aunque no se mostró contrario en términos generales.

Las organizaciones agrarias explican que participaron de forma activa en la elaboración de esta ordenanza a través de diversas reuniones que mantuvieron con el Consistorio, si bien no se contempló su propuesta de elevar a 30 kilómetros por hora la velocidad límite del viento para evitar que los malos olores lleguen hasta el casco urbano de Huesca.

Así que ahora han decidido alegar y esperar para ver si su recurso de suprimir el artículo 5 surte efecto.

Jesús Ballarín, responsable comarcal de Uaga-Hoya de Huesca, explica que la alegación presentada recoge "que tampoco existe un estudio que demuestre una relación directa entre una mayor incidencia del viento con los olores". Además, su recurso recoge "que se apueste por el compostaje de los estiércoles sólidos, el punto más importante", puntualiza. En esta línea, indica que a través de este proceso "se deja más tiempo al estiércol fermentar para que se lleven a cabo así los procesos de descomposición antes de aplicarlo en campo y lograr menos olores". Se trata, continúa, de que el Consistorio deje tener a los ganaderos durante un poco más de tiempo el estiércol en el campo.

Añade que esta velocidad límite de 15 kilómetros por hora "no es realista porque la Aemet nos da velocidades punta y no todo el día va a soplar el viento así, además puede que las rachas no se dirijan hacia la ciudad de Huesca sino a otro sitio, por lo que al tratarse de un periodo de paro de 48 horas puede limitar mucho el trabajo".

Asimismo, expone que si se contrata a una empresa externa o servicio para realizar la gestión "eso también limita el trabajo". Por su parte, Gerardo Torralba, secretario técnico de Uaga, opina que esta alegación "se fundamenta sobre todo en que vemos que es difícil para el agricultor manejar ese sistema. En primer lugar se trata de una predicción de la Aemet, que a veces fallan, y eso puede implicar cierta complejidad".

Así, indica que el sector puede toparse con inconvenientes para organizar su trabajo en función del viento, "eso si uno aplica su propio estiércol en su explotación, pero si hay que buscar además una empresa de terceros para ello es todo mucho más complicado porque no vas a tener la seguridad de qué día pueden venir o no". Torralba aplaude que estas tres entidades hayan unido sus fuerzas para hacerse oír, algo que también destaca Fran Santolaria, de UPA-Aragón, que puntualiza que aunque se ha sugerido que el límite de viento se suba a esos 30 kilómetros por hora, el sector está abierto a admitir los 25 km/h, "pero no la mitad".

"Hay que buscar el equilibrio. Lo que tenemos muy claro es que no queremos afectar a los ciudadanos de Huesca, pero de manera que se pueda trabajar", plantea. El Ayuntamiento deberá valorar ahora esta alegación y dar una respuesta a las organizaciones agrarias antes de que se publique la ordenanza definitiva.