Huesca

MERCADO INMOBILIARIO POSCOVID

Se buscan pisos con terraza y casas con jardín fuera de Huesca

La tendencia tras el confinamiento es más interés en inmuebles con espacios abiertos

Se buscan pisos con terraza y casas con jardín fuera de Huesca
Se buscan pisos con terraza y casas con jardín fuera de Huesca
P.S.

HUESCA.- La actividad en el mercado inmobiliario en la ciudad de Huesca se recupera y se sitúa en niveles precovid. Así es al menos respecto a las compraventas y a la demanda o interés en comprar, según diferentes inmobiliarias consultadas por este periódico.

Todas confirman varios cambios en las preferencias a la hora de comprar. "Ha habido un incremento grande de quienes buscan fincas de recreo fuera de Huesca", explican Sergio Martín y Sara Lafuente, de Fincas Aragón. Casas con piscina, jardín, y "los huertos, que en los últimos años habían estado bastante parados", coincide Lourdes Mur, socia de Vive Inmuebles. Martín incluso considera que este cambio de tendencia puede ser "una oportunidad que puede situar los pueblos" como lugar de residencia preferible.

Cambios de criterio justificados por el haber vivido en confinamiento, eventualidad que por el momento no se ha traducido en una bajada de precio. Javier Caudillo, gerente de Pirineos Centro Inmobiliario, insiste en hacer referencia a las cifras de transacciones realizadas y no a aquellas que se basan en intenciones de venta: "De marzo de 2019 a marzo 2020, los precios medios han subido un 13 % en Huesca", situándose en los 2.400 euros por metro cuadrado para la obra nueva y en los 1.337 euros para la segunda mano. "De las pocas que se hayan vendido durante estos meses, veremos a qué precio se han hecho".

UNA DEMANDA MÁS DECIDIDA

Sobre la situación general del sector todos coinciden en que no ha pasado tiempo suficiente. "Es muy pronto para sacar ninguna conclusión. De nuestra experiencia te puedo decir que estamos satisfechos. Las demandas están un poco más flojas que al principio del año, pero desde que volvimos el 11 de mayo, a nivel de transacciones, estamos satisfechos", explica Caudillo.

Desde Fincas Aragón, tras dos meses, no notan "diferencia respeto a antes. Sigue habiendo demanda", explican sus socios Sergio Martín y Sara Lafuente.

Eso sí, quienes están interesados en comprar, a ojos de las agencias, parecen llegar con una intención más decidida que antes del confinamiento.

Tanto en la oficina de Huesca como en la de Jaca, desde el 11 de mayo que abrieron, explica Caudillo, "se están cerrando bastantes operaciones y de importes considerables, vendiendo casas que hacía tiempo que teníamos en cartera y no terminaban de salir". "Hay gente -continúa- que se está interesando y están comprando. Tenemos varias operaciones en chalets cerca de Huesca que las hemos cerrado bastante rápido y en pisos pasa lo mismo".

Tras el confinamiento "la gente salió con ganas de comprar y de ver pisos", recuerda Lourdes Mur, de Vive Inmobiliaria.

Dos primeros meses "buenos" que no aseguran nada. "La incertidumbre está después del verano porque nadie sabe lo que va a pasar", apunta Caudillo. Todos contemplan que pueda resentirse la demanda . En Vive, se ha empezado a percibir cómo "desde mitad de junio se ha cerrado bastante", aunque "me inclino a pensar -añade Ernesto Escolano, también socio de dicha inmobiliaria- que se debe a que por lo general en esta época el mercado está mucho más tranquilo". Aunque no prevén una inactividad total, "yo creo que habrá un parón que durará hasta marzo", añade Mur.

Desde el punto de vista financiero es, quizás, donde la confirmación de las compraventas pueden verse demoradas. Mur y Escolano explican que el hecho de que la mayoría de la población haya estado en ERTE o hayan tenido que cesar su actividad puede dificultar la financiación. "Al fin y al cabo, a la hora de financiar necesitan por lo menos una estabilidad laboral, quien está en un ERTE mal, tienes que cumplir más requisitos, presentar avalista; se están dando más problemas financieros", explican.

Tras el confinamiento, en Vive han percibido que "la figura del inversor ha bajado". "No sea una figura -la del comprador como inversor- que nosotros trabajemos mucho, pero sí que había muchísima gente que nos llamaba para preguntarnos", explica Lourdes Mur. Desde que abrimos el 11 de mayo, asegura, el inversor ha desaparecido. Todo lo que nosotros hemos vendido es para vivir". Una bajada normal, para Martín de Fincas Aragón, que considera que no es que no se quiera invertir lo que pasa es que la gente está esperando a ver qué pasa, está latente.