Huesca

CRISIS DEL CORONAVIRUS

El ocio nocturno de Huesca sigue solicitando medidas para poder sobrevivir

Tras casi un año cerrados, el sector no puede más y pide soluciones al Gobierno autonómico

El ocio nocturno de Huesca sigue solicitando medidas para poder sobrevivir
El ocio nocturno de Huesca sigue solicitando medidas para poder sobrevivir
P.S.

HUESCA.- "Cuando la consejera de Sanidad dice que en Aragón no ha cerrado la hostelería, miente". Así de contundente se muestra Carlos Bordonaba, propietario de dos bares de ocio nocturno situados en la plaza de los Fueros de la capital oscense, porque recuerda que "el ocio nocturno lleva cerrado desde marzo".

Para intentar sobrevivir a esta situación, Bordonaba explica que ha tenido que despedir a todos sus trabajadores y así ahorrarse los gastos de la Seguridad Social, pese a ello, indica que "hay gastos a los que no se pueden renunciar, como la luz, el agua o la alarma de los locales", además de la cuota de autónomos, gasto que es considerado por él como "vergonzoso, ya que no están dejando el derecho al trabajo", reivindica.

"Entendemos que el ocio nocturno es muy complicado en esta crisis sanitaria, y por eso fuimos los primeros en cerrar", reitera, pero considera que desde el sector son conscientes de todas las medidas que hay que tomar. "Los que estamos en los locales también tenemos familia y no queremos llevar el virus a casa", expresa.

En este sentido, Bordonaba explica que cuando se les permitió abrir el pasado mes de junio sus establecimientos contaban con personal de seguridad, tanto fuera como dentro, para que en ningún momento los clientes incumplieran las normas. "Esta decisión no era viable, pero era lo mejor para no tener que volver a cerrar", defiende el propietario, quien afirma que en varias ocasiones la policía les felicitó por cómo estaban gestionando la situación.

Pese a ello, Sanidad ordenó cerrar sus establecimientos cuando los datos de contagios comenzaron a alcanzar números preocupantes. "A pesar de que nosotros ya llevábamos más de 20 días cerrados, los datos no dejaban de subir", denuncia Bordonaba.

Por ello, considera que en numerosas ocasiones desde el pasado mes de junio, la hostelería ha estado siendo el "conejillo de indias" de Sanidad, ya que reitera que "hasta que no se han tomado otras medidas como el estado de alarma o el toque de queda, no han disminuido los casos". "Hemos perdido unos meses que nadie nos va a pagar, y después de tanto tiempo cerrados se hace muy duro", lamenta el propietario de ambos locales.

Desde el sector se muestran indignados con las medidas de la Consejería de Sanidad y denuncian que, a pesar de todos los obstáculos para poder llevar a cabo su actividad con normalidad, no han obtenido ninguna explicación desde la DGA. "La única vez que el Gobierno de Aragón mencionó al ocio nocturno fue el pasado mes de julio, cuando Javier Lambán declaró que era letal", señala el propietario de El Palmar y La Cantina.

En cuanto a la flexibilización de las medidas anunciadas por Sanidad, Bordonaba señala que están satisfechos por el sector, siempre y cuando no les hagan retroceder en enero. "Que no nos dejen un tanto por ciento de aforo para poder decir que han salvado la Navidad, los eslóganes populares se los pueden ahorrar", reivindica.

Así mismo, pide que les ayuden de alguna manera, ya que hay otras comunidades en las que los políticos han trabajado para que los cierres del sector hostelero sean ocasionales, y les afectasen en la menor medida posible a los ciudadanos, "mientras que aquí lo fácil ha sido cerrar la hostelería y olvidarse del sector", denuncia. En este sentido, Bordonaba solicita que "si no es posible por ley, que por derecho o por humanidad nos den una solución, ya que hay empresarios que lo están pasando francamente mal y están poniendo los ahorros de toda su vida para mantener en pie sus bares".

Es más, desde los propios establecimientos tienen ideas para el control de los clientes de cada local -por ejemplo con códigos QR- en el caso de que se conozca algún positivo, "como ya hacen en otras ciudades de España", explica, y agradece a todos los clientes habituales que "si a día de hoy estamos vivos es gracias a la clientela, que a pesar del frío y el mal tiempo, han estado viniendo durante toda la tarde", concluye.