Huesca

ENTREVISTA

Luis Felipe, alcalde de Huesca: "No es fácil tomar decisiones, no hay guion, no hay una experiencia anterior"

El edil repasa algunos aspectos del presupuesto para 2021 así como la situación de la ciudad tras casi diez meses de pandemia

Luis Felipe, alcalde de Huesca: "No es fácil tomar decisiones, no hay  guion, no hay una experiencia anterior"
Luis Felipe, alcalde de Huesca: "No es fácil tomar decisiones, no hay guion, no hay una experiencia anterior"
P.S.

HUESCA.- El alcalde, Luis Felipe, repasa los aspectos generales del presupuesto de 2021, obviamente condicionado por la crisis. De los meses de pandemia, señala que es una situación para la que no hay una suerte de manual de gestión, en el Ayuntamiento la guía ha sido el acuerdo en las decisiones.

Han insistido en que el presupuesto queda al albur de la evolución de la pandemia.

-La situación es excepcional y es cierto lo que hemos ido diciendo que es un presupuesto vivo que habrá que adaptarlo a las circunstancia de cada momento. Pero debo recordar que ya lo fue el pasado. No estando previsto para atender una pandemia, conseguimos un millón de euros para ayudas directas al sector productivo, duplicamos las ayudas de urgencia, atendimos los dispositivos de ayuda a las personas vulnerables. Es cierto que no hay un manual de uso para gestionar una pandemia. No lo tiene ninguna institución. En Huesca, afortunadamente, ha sido la unidad de los grupos municipales en favor de la ciudad.

¿Ha resultado muy complicado tenerse que adaptar a necesidades que se iban imponiendo casi sobre la marcha?

-La declaración de estado de alarma dio herramientas normativas a los servicios técnicos para llevar adelante las decisiones que estábamos llevando adelante Y a nivel político, creo que hubo un gran entendimiento para tomar decisiones que no estaban previstas y que había que tomar con cierta inmediatez. Lo que hubiera sido en otro tiempo muchas disquisiciones y discrepancias políticas en un presupuesto del calado del que hicimos, afortunadamente se tomaron por consenso. No hubo una batalla política. Lo entendimos los grupos municipales desde el momento en que surgió el problema. Eso ayudó mucho.

En poco se va a cumplir un año del reconocimiento oficial de la pandemia. Hay un cansancio de meses de tensión y de adaptaciones a normativas cambiantes. Llevado al ámbito económico ¿está al límite la situación en sectores como hostelería, comercio o servicios relacionados, que incluso sea imposible de sostener con ayudas públicas?

-Es cierto que se nota en los ciudadanos una fatiga pandémica, como se denomina. Los ciudadanos estamos cansados de las restricciones a las que estamos obligados. Nosotros intentamos inyectar dinero en el tejido productivo local, para amortiguar el coste que la pandemia estaba teniendo en todos los sectores, pero sobre todo en comercio y hostelería. Todavía sigue, pero, afortunadamente, ya ha comenzado la campaña de vacunación, la más importante de los últimos tiempos en el mundo, que va a llevar a que se limiten mucho los efectos del virus en todos los frentes: sociales y económicos. Llegaremos justos, porque el castigo a estos sectores, pequeños negocios en general ha sido muy alto. Y aunque ha habido un esfuerzo, tanto del Ayuntamiento como de otras administraciones, de intentar paliar esos efectos, si continuara durante unos meses más, no sería suficiente y el coste sería mucho más alto. Pero confío que entre todos, entre el comportamiento individual de cada uno de nosotros mientras dure este proceso, y los efectos de la vacunación, esperamos que en 2021 se vuelva a normalizar la situación económica. No estamos en una crisis estructural como la que vivimos en 2018 sino en una coyuntural provocada por un virus. En tanto en cuanto se consiga mitigar los efectos del virus, la economía irá recobrando la fuerza que tenía.

No obstante, todo apunta a que durante muchos meses habrá restricciones, que el verano no será normal...

-Sí, las restricciones van a seguir y habrá cosas que ha traído este virus que se quedarán para siempre. Ahora cualquiera de nosotros ve imágenes de gente abrazándose, celebraciones multitudinarios y nos provoca de entrada extrañeza. Alguna cosa va a cambiar en nuestros hábitos de relación. Y va a ser un año complicado a nivel de gestión y de recursos. Aunque tienda a enderezarse la situación por la vacunación y el optimismo que pueda haber en nuestro ánimo, habrá una sangría económica importante y un coste y una factura en los sectores productivos. Y las administraciones tendremos que seguir priorizando lo que es la atención social y los recursos a los sectores productivos más cercanos.

Durante estos meses, sobre todo en el estado de alarma, uno de los aspectos clave ha sido la colaboración con entidades del ámbito social ¿Han hablado con estas entidades para elaborar el presupuesto teniendo en cuenta sus previsiones La oposición ha criticado recortes en esta materia.

-Cuando tienes que tomar decisiones de un presupuesto y de entrada vas a tener una merma de ingresos, al final tienes que hacer ajustes. Entendimos que había que duplicar las ayudas directas que da el Ayuntamiento de urgencia social, había que incrementar las ayudas al sector productivo y una fórmula de ajuste estaba en que no las sociales, sino las subvenciones que el Ayuntamiento aporta a diferentes colectivos de la ciudad iba a haber un ajuste del 10 %. Necesitamos esos recursos, entendiendo también que en muchas de las cuestiones que este año hemos hecho juntos ya ha habido un esfuerzo. El ajuste no va a conllevar desequilibrios en las actividades más prioritarias de la vida asociativa, porque también asociaciones y colectivos van a tener que priorizar sus acciones en este 2021. No va a ser un año normal. Por lo tanto, muchos de los recursos municipales que se destinaban a financiar actividades no van a ser prioritarios dado que no se van a ejecutar por las limitaciones que nos va a tocar vivir. El Ayuntamiento decidió potenciar los recursos propios del Consistorio y realizar ajustes en las ayudas a otros colectivos.

Uno de los sectores que también ha quedado muy tocado es la cultura, que depende en buena medida de la contratación pública ¿Se va a mantener la programación municipal?

-Sí. De hecho, estas Navidades el área de Cultura sigue programando una cultura segura y, de hecho, hay que seguir manteniendo una seña de identidad de la ciudad como es la cultura y la ayuda a los sectores de actividad de la cultura oscense. Cuando hablamos de ese ajuste del 10 % hablamos de todo: deporte, acción social, acción cultural, vecinal. Todo. No era una decisión fácil, pero cuando hay una previsión clara de que va a haber una merma de ingresos, no se puede obviar eso y hay que hacer un presupuesto realista, aunque tenga un coste en la crítica, que acepto.

¿Y en cuanto a la inversión?

-Mantener 5,8 millones de euros en inversión pública es seguir generando empleo Es importante porque en la obra pública trabajan muchos gremios. Es una buena medida de incentivar empleo.

¿Hasta qué punto son seguras las transferencias de otras administraciones públicas en un escenario de crisis?

-En principio, durante 2020 ha habido un cumplimiento de previsión y no hay anuncios de que esa previsión se pueda ver mermada. En todo caso, se puede ver mermada por la tributación local, que haya menos actividad económica, en construcción... y eso lleve a que la financiación local se resienta como estamos viendo la dinámica que hay: al haber menos actividad, menos posibilidades negocio por las restricciones, la tributación local baja y se está viendo ya.

Le he mencionado antes el cansancio por tantos meses de pandemia. ¿Se percibe alguna suerte de relajación o menor cumplimiento en las restricciones

-Creo que la responsabilidad sigue estando como una seña de identidad de Huesca. Otras ciudades, en las no celebraciones o no fiestas han tenido unos resultados mucho más negativos que tuvo Huesca. Mantuvimos bien los efectos de las no fiestas, de la subida a Primera División del Huesca, de la apertura de piscinas, de la apertura de colegios. Seguimos siendo una ciudad responsable, pero es cierto que en la sociedad en general se nota una fatiga por las restricciones, los confinamientos, los toques de queda, que van generando una fatiga y que se generen algunos incumplimientos. Pero dentro de esto, sigo manteniendo que Huesca es una ciudad tremendamente responsable.

Me llamó la atención una reciente advertencia de la Junta Local de Seguridad sobre el efecto negativo de las modificaciones normativas, porque puede llevar a confusión ¿La comparte?

-A veces, durante tantos meses de tantas restricciones, de tantas limitaciones, de más de una administración tomando decisiones se genera cierta confusión. Si le sumas que son muchas semanas de restricciones, eso tiene lógicamente un efecto en la sociedad. Estábamos viendo que las sanciones de la Policía por el incumplimiento del toque de queda o del confinamiento perimetral iban aumentando progresivamente. Y se debe fundamentalmente a esa sensación de fatiga. Pero eso ocurre aquí y ocurre en todas las ciudades españolas. Hay que prever lógicamente qué efectos colaterales conllevan las decisiones que se toman y durante cuánto tiempo se puede mantener. No es fácil tomar decisiones. Lo hablaba antes: no hay guion, no hay una experiencia anterior. Con lo cual, desde las autoridades sanitarias, desde los especialistas, los epidemiólogos, las decisiones son difíciles de conjugar con la actividad económica o con una necesidad de mantener abierto un negocio. No es nada fácil articular bien ese binomio y a veces se provocan situaciones de cierta confusión.

Comentaba hace un año que se sentía cómodo con la situación de un gobierno en minoría y apoyos puntuales de Ciudadanos ¿Se plantea ahora la posibilidad de ofrecer a este partido que tome responsabilidades de gobierno?

-Eso es una decisión que tiene que tomar Ciudadanos, en la que yo no entro. Estamos en un gobierno en minoría y estamos consiguiendo sacar muchos asuntos de la ciudad por unanimidad y otros por la suma de Ciudadanos, como son los presupuestos. En Huesca se vuelve a producir un fenómeno ya casi habitual: la coincidencia de Podemos con el Partido Popular en la confrontación al gobierno socialista. Eso tendrán que explicarlo ellos. Hay cuestiones que no entiendo. Por ejemplo, en las últimas propuestas de este presupuesto que ya de entrada Podemos dijo que no iba a aceptar, independientemente de la aceptación de sus propuestas, salvo la plaza de toros, en el resto coincide con el Grupo Popular. No sé si hicieron juntos las propuestas o que comparten estrategia. Tendrán que explicarlo ellos. En todo caso, agradecer al grupo Ciudadanos la aportación al presupuesto. Han tenido clara una vocación muy decisiva de apoyo al tejido productivo. Nos ha llevado a que en la propuesta se incrementara lo que fue iniciativa suya de los bonos impulsa y que presupuestariamente ha tenido una reafirmación este año. Vox, por ejemplo, el concejal Antonio Laborda, está más en el diálogo en materia presupuestaria de lo que puedan estarlo Podemos o el PP. A cualquier analista externo le puede llamar la atención esa coincidencia que en los planteamientos políticos tienen.

¿Qué cuestiones de programa, agenda o previsiones que tuviera a principios de mandato y que la pandemia ha obligado a postergar querría aplicar este año?

-Lo que es mantenimiento de ciudad, que es una constante. Este presupuesto va a tener dos cuestiones importantes como un plan de asfaltado de medio millón de euros que llega a todos los barrios y que es una de las medidas más equitativas a nivel territorial, y por otro lado, un proyecto que creo que es innovador y pone en valor una demanda de los ciudadanos que es muy constante como es la colaboración con la Diputación de más de medio millón de euros para adecuar los caminos que unen las albercas y humedales de la ciudad de Huesca en un doble sentido: en el plano de práctica deportiva, de bici o de caminar, y en el de educación medioambiental, que es muy importante y que va a ayudar a poner en valor algo que los ciudadanos ya ponen de por sí en su rutina de paseo que los ciudadanos no tenían incorporada a su agenda medioambiental. Y luego, continuar con lo que son las inversiones en obra pública, con lo que tiene que ver con grandes arterias, como Ramón y Cajal, etcétera. Luego, aspectos importantes como seguir apostando por acción social y el apoyo al sector productivo local.

A nivel personal ¿cómo está?

-Bien, con preocupación como todos los ciudadanos. Tenemos que estar muy atentos por hacer todo lo posible para protegernos, para protegerme yo y proteger a los vecinos en esa situación tan difícil. Y segundo, yo diría que dentro de todas las dificultades, satisfecho con el comportamiento de la sociedad oscense que ha sido en muchos momentos ejemplar.