Huesca

PERSONAS EN SITUACIÓN IRREGULAR

Cáritas alerta del aumento de personas en situación irregular en Huesca

Más de cien en la ciudad se han visto abocadas a esta situación sobrevenida

“Esperábamos trabajadores, vinieron personas y queremos vecinos” es el lema de la campaña que lanzó hace unos meses la red de Cáritas.
“Esperábamos trabajadores, vinieron personas y queremos vecinos” es el lema de la campaña que lanzó hace unos meses la red de Cáritas.
Cáritas Diocesana

Cáritas Diocesana de Huesca alerta del incesante incremento de personas en situación de irregularidad administrativa sobrevenida, que actualmente genera uno de los escenarios de vulnerabilidad más graves.

Más de 100 personas en la ciudad de Huesca, la mitad de ellos menores de edad, ya se han visto abocadas a esta situación y otras 200 están en riesgo de sufrirla en las próximas semanas o meses, indica esta entidad solidaria.

Esperábamos trabajadores, vinieron personas y queremos vecinos” es el lema de la campaña que lanzó hace unos meses la red de Cáritas y que “hacemos nuestra para recordar la capacidad de acogida y hospitalidad que tenemos como comunidad y nuestro compromiso como sociedad con estas personas, que se han visto obligadas a abandonar sus hogares y muchas veces, a sus familias para sobrevivir”, apunta Felipe Munuera, director de la entidad.

Además Cáritas Huesca se suma a esta campaña “para acercar a la sociedad esta realidad invisible: la irregularidad sobrevenida. Una expresión que hace referencia a una situación administrativa en la que incontables personas migrantes se quedan cuando, por diversos motivos, dejan de cumplir los requisitos que exige la Ley de Extranjería. Las personas que sufren este problema se ven privadas, entre otros derechos, del acceso al empleo y a cualquier prestación social”.

Ante esta imperante realidad, “queremos alzar la voz para apoyar públicamente a estas personas, que llegan a España huyendo de la violencia, el hambre, la pobreza, las injusticias, y denunciar su situación”, destaca Munuera. Al mismo tiempo, desde la entidad se está iniciando una ronda de conversaciones con otras entidades públicas y privadas, para establecer mecanismos de coordinación eficaz, que respondan a las acuciantes necesidades que genera este problema en nuestra región y a las que Cáritas Huesca no puede hacer frente de forma individual.

La entidad muestra una gran preocupación ante este escenario que va en aumento, en parte por las consecuencias derivadas de la última reforma de las instrucciones en materia de Protección Internacional y Asilo. Cáritas Huesca insiste además en la necesidad de ofrecer recursos concretos para demostrar ese compromiso, sobre todo en materia de vivienda y ayudas sociales, de alimentación y suministros. Y subraya la necesidad de apoyar públicamente esta realidad para romper estereotipos y posturas xenófobas.