Samuel Escámez: “Nosotros reivindicamos que el Día de la Bicicleta sea todos los días”

Con motivo este lunes, 19 de abril, del Día Internacional de la Bicicleta, la plataforma Huesca en Bici, sin los habituales actos de concentración, reivindicación y sensibilización debido a la pandemia, pusieron de manifiesto la necesidad de “realizar infraestructuras bien hechas” en la ciudad.

Su portavoz, Samuel Escámez, recordó a este periódico que la principal demanda es que “aunque este día fue una propuesta de la Federación Europea de Ciclistas, nosotros reivindicamos que el Día de la Bicicleta sea todos los días y que las administraciones apuesten por ella todo el año, que se incluya en los presupuestos y haya actuaciones generalizadas en urbanismo que la favorezcan y no la excluyan como a veces ocurre en Huesca”.

En este sentido, Escámez insiste en que “en Huesca, los carriles bici sobre las aceras lo único que hacen es crear mala imagen de los ciclistas, que entramos en constante conflicto con los peatones, y al revés”, por eso defiende la circulación por la calzada.

Lamenta que en la capital oscense la bicicleta no ha tenido tanto auge como en ciudades grandes, a lo que tampoco ha ayudado, desvela, el que la bicicleta se considerase tradicionalmente en España “el vehículo de los pobres porque era para quien no tenía dinero para un coche, un concepto que no tienen en el resto de Europa”.

Ve necesario que se adapten las infraestructuras, según los usos de las calles y las necesidades de cada barrio, para fomentar el empleo de la bicicleta, porque, añade que “sí que es cierto que en los últimos años se ven más bicicletas por la peatonalización del centro, se ve más gente que antes iba en coche y ahora en bici” y subraya que “el trabajo que hemos hecho de concienciación va generando cambios en las costumbres”, “incluso los conductores de coches ya están acostumbrados”, puntualiza Escámez.

El portavoz reclama vías que limiten la velocidad de los vehículos a motor pero por sus características no solo con señales, como ocurre en otras ciudades europeas, y pone como ejemplo “la creación de carriles bici en polígonos como en la ronda de la industria que con un carril para bicicletas en lugar de dos carriles en cada sentido se limitaría la velocidad y se podría embellecer la zona, que buena falta hace”.