Huesca

CRISIS DEL CORONAVIRUS

El pasaporte covid, una medida con pros y contras

Federico Arribas señala que es mejor que cerrar negocios y Nacho De Blas considera la medida como "arbitraria"

Petición del pasaporte covid en un local de ocio nocturno de Huesca.
Petición del pasaporte covid en un local de ocio nocturno de Huesca.
Pablo Segura

Más vacunación y más vacunación. Este, junto con el cumplimiento de las medidas sanitarias y el sentido común de los ciudadanos, es el consejo de Nacho de Blas -quien reclama ya alguna restricción en horarios o aforos- y Federico Arribas para minimizar los daños de la covid, pero ambos rechazan una vacunación obligatoria.

La medida en vigor más novedosa en Aragón es el certificado covid, sobre el que Arribas, secretario de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) y profesor de Salud Pública de la UZ, declara que no está a favor de la vacunación obligatoria, pero que el pasaporte ofrece “ventajas” en el control de la enfermedad: “Si en hostelería y otros lugares cerrados, todos están vacunados, aunque haya un infectado, tendrá menos carga vírica”. Añade a renglón seguido que el riesgo “no es cero” y llama a evitar el “error usual” de que “esto es jauja” pese a la vacuna y el certificado.

Mirando a la economía, expone que prefiere “un control en los negocios para que sigan funcionando a que se cierre, porque hay un grave problema económico con personas que llevan un año cerradas”.

Asimismo, lamenta que en unas comunidades se apruebe el certificado covid y en otras no y, “como ciudadano”, dice que le gustaría “ir todos a una. Sería lo razonable porque el bicho no entiende de fronteras”.

Más dudas y críticas tiene De Blas respecto al pasaporte. “¿Confiar solo en el certificado covid?... No sé”, responde el epidemiólogo veterinario, que señala algunas contradicciones de una medida “un tanto arbitraria”: “En actividades para mayores no lo piden, pero en las de jóvenes sí”.

Asimismo, la considera un “obligar a vacunarse sin que la vacuna sea obligatoria”. De Blas subraya nuevamente que “la vacuna nos ha salvado de mucho, pero no se puede confiar solo en ella”, y reclama una vuelta a la “filosofía” del “test, test, test; rastreo, ventilación y mascarillas”.

Por otra parte, Arribas también recuerda que la SEE considera más necesario vacunar antes a países con bajas tasas que poner la tercera en las naciones desarrolladas. Ya no solo es por altruismo sino también por interés propio: “Podemos inmunizarnos nosotros frente a lo que circula aquí, pero si viene una nueva nos puede jorobar, como puede ser el caso de la sudafricana”.