Cadis visibiliza a la mujer con discapacidad y las barreras que hay

Hace once años, Karolina Jackiewicz-Jaromin arribó a España procedente de su Polonia natal. Karolina es sorda y decidió emigrar debido a la falta de recursos para estas personas que había entonces en su país de origen. Ahora trabaja en Asza (Agrupación de personas Sordas de Zaragoza y Aragón) y protagoniza el primer vídeo de la campaña “Mi voz, mi historia”, que Cadis Huesca ha lanzado para visibilizar a las mujeres con discapacidad o dependencia.

Once años atrás, la situación económica y para las personas sordas era “horrible” en Polonia. Sus suegros ya vivían en España y le dijeron que este país parecía “otro mundo” para las personas con discapacidades auditivas, así que Karolina hizo las maletas.

La “primera barrera” al llegar fue el idioma, porque como ella misma explica en el vídeo (https://www.youtube.com/watch?v=Are6hppFuo8) “cada país tiene su lengua de signos”. Aunque algunos signos se parecen y alguna persona conocía la lengua de signos internacional, el idiomático fue el primer escollo, por lo que tuvo que aprender la lengua de signos española y a escribir castellano.

El camino se allanó cuando empezó a trabajar y también porque aquí tiene la opción de “reservar” un intérprete de Asza para que le ayude.

Y aunque apunta que las personas sordas siguen teniendo barreras en la comunicación en España, señala que la situación es mejor que en su país natal y también que cuando llegó: “No se puede comparar a cómo estaba antes”. Y mirando al futuro, Karolina se muestra “segura” de que las barreras que aún quedan irán cayendo. “La sociedad va mejorando y entendiendo las cosas”.