Pagos a terceros

Hoy os acerco el caso de Mayra, que acudió a la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) del Ayuntamiento de Huesca a presentar una reclamación porque en la factura del teléfono le cobraban servicios que no había contratado.

Revisó las facturas y comprobó que esos servicios de “Pagos a Terceros” se los venían cobrando en las facturas desde hacía 6 meses, con un importe mínimo de 28 euros de más en cada factura. En total, había pagado 160 euros más de lo que le correspondía. Mayra intentó solucionarlo con su compañía. Le informaron de que eran pagos a una empresa de entretenimiento y ocio, pero sólo consiguió que le reembolsaran 24 euros. Por ello solicitó la intermediación de la OMIC, con el objetivo de recuperar todos los importes supuestamente cobrados de más de unos servicios que no había utilizado ni contratado.

Desde la OMIC realizamos dos mediaciones amistosas una con la empresa proveedora de los servicios y otra con el operador de telefonía que se los había cobrado en la factura. El proveedor de servicios, al recibir la solicitud de mediación, respondió en desacuerdo con las manifestaciones vertidas por la usuaria, pero aceptó estimar la reclamación y acordó reembolsar a la clienta el importe de 160 euros. Para ello solicitaban que la reclamante facilitara el número de cuenta.

Lo comunicamos a la reclamante, pero no estaba de acuerdo en facilitar el número de cuenta a una empresa desconocida. Quería que se lo ingresaran en la cuenta donde tenía domiciliadas las facturas de telefonía y en la que le habían facturado.

A su vez recibimos la respuesta del operador de telefonía, en la que indicaban que los “Pagos a Terceros” son servicios ofertados por terceras empresa proveedoras de los mismos, ofreciendo contenidos como música, juegos, noticas, etc.; y que son contratados directamente entre el cliente titular de la numeración móvil y el tercero, sin ser el operador de telefonía parte de la contratación aunque los facture.

No obstante acordó devolver la cantidad de 160 euros correspondientes al consumo de Pagos a Terceros, dado que la reclamante no estaba conforme con dicha facturación. También informó que el proveedor podría reclamar el importe de esos servicios directamente al reclamante.

Como las dos empresas implicadas estaban de acuerdo en devolver a la reclamante el importe con el que no estaba de acuerdo, le comunicamos a la empresa proveedora de los servicios que para no tener que facilitarle la cuenta bancaria para el reembolso, la reclamante aceptaba la devolución a través del operador de telefonía.

Mayra recibió el importe de 160 euros de su compañía de telefonía y el proveedor de servicios archivó el reclamo de dicho importe.