La inflación hacer crecer la “espiral” de endeudamiento

La altísima inflación que desde hace un año golpea las carteras de los ciudadanos no solo se nota en unas compras más pequeñas y una mayor presencia de productos más baratos, como las marcas blancas.

El endeudamiento para hacer frente a los gastos puede parecer una buena salida pero en muchos casos acaba siendo peor el remedio que la enfermedad. Fuentes de Aicar-Adicae (asociación de usuarios especializada en servicios financieros) señalan que las consultas de sobreendeudamiento han crecido un 20 % en noviembre y diciembre de 2022 respecto al año anterior. También llaman la atención sobre el 5 % que han aumentado las consultas acerca de créditos rápidos y créditos al consumo.

¿ Y cuál es la causa de estos incrementos? Para Aicar-Adicae, está claro: “La insufrible inflación y esta crisis descontrolada de precios”.

Según la entidad, no hay ningún perfil concreto de usuario de créditos para el consumo, lo que hace que “ningún consumidor se encuentre exento al sobreendeudamiento”. Pese a ello, sí diferencia entre quienes acceden porque tienen “necesidades inminentes” y no cuentan con ahorros de aquellos que optan por comprar y aplazar los pagos, y de un tercer grupo: quienes tienen trastornos que requieren de acceso rápido a la financiación.

“Espiral de sobreendeudamiento”

“Muy preocupados”, así se declaran las fuentes de Aicar-Adicae por la financiación a través de las tarjetas de crédito (el “revolving”, por ejemplo) y por las fórmulas que ofrecen los establecimientos financieros de crédito. “Facilitan de una forma irresponsable crédito a un porcentaje alto de interés y que adapta las cuotas a lo que el consumidor puede pagar”, según indican desde la organización.

“Condiciones usurarias”

Para Aicar-Adicae, hay que advertir sobre el aumento del porcentaje de créditos rápidos, “que puede generar una espiral de sobreendeudamiento, ya que la financiera no realiza ningún tipo de evaluación de solvencia” y aunque facilita el primer crédito sin intereses, luego “las condiciones de impago son usurarias”, llegando“al 4.000 % de interés de demora”.

Para la entidad, la banca tradicional es “más rigurosa” al conceder crédito que “la que ofrece créditos rápidos y de bajo importe a través de medios y redes”.Este tipo de crédito “queda al margen de la normativa”, advierte.

Por todo ello, fuentes de Aicar-Adicae aconsejan meditar bien si es necesario pedir un crédito, “desconfiar” de quien ofrezca interés 0 y leer detenidamente el contrato.