Huesca

entrevista

José Luis Gómez: “¿Que si estamos dejados de la mano de Dios? Pues sí, apenas tenemos apoyos”

El portavoz de la Veracruz pide más financiación para la Semana Santa

José Luis Gómez: El portavoz de la Veracruz pide más financiación para la Semana Santa
José Luis Gómez: El portavoz de la Veracruz pide más financiación para la Semana Santa
Pablo Segura

La Semana Santa volverá a hacer vibrar las calles de Huesca del 2 al 9 de abril con el sonido de bombos, tambores y cornetas, al paso de los 4.000 cofrades de la ciudad. La Archicofradía de la Santísima Vera Cruz se ha esforzado al máximo, un año más, para mantener viva esta celebración para la que su portavoz, José Luis Gómez, reclama más apoyo por parte de las instituciones porque se sienten “dejados de la mano de Dios”.

¿Cómo se prepara una Semana Santa como la de Huesca?

—Supone que cuando este año se acabe la procesión del domingo de resurrección ya tenemos cientos de notas tomadas sobre aspectos a cambiar, a mejorar, fallos que haya podido haber o cosas que se podrían incorporar. A partir de ese día ya se empieza a trabajar en la Semana Santa del año siguiente. Mantenemos reuniones constantes, el programa no se hace en un día ni en dos.

¿Cómo se financia todo esto?

—Para preparar la Semana Santa hace falta un gran esfuerzo económico. Se lucha con lo que se puede, recortando gastos. Por ejemplo, en la Archicofradía los sellos no existen, salvo contadísimas excepciones. Todo se reparte buzoneando, entre cofrades y miembros de la junta.

Reclamaron ustedes hace un mes más apoyo económico de las administraciones, ¿ha habido algún avance?

—De momento no. Nosotros nos tiramos a trabajar sin red y esperamos a ver luego qué se puede recoger. Lógicamente, si no se recauda, no empezamos, eso está claro. Lo que no podemos hacer es empezar el año a cero y hacer encargos como por ejemplo la imprenta, por el programa y la cartelería, que al final sube hasta los 5.000 ó 6.000 euros. No podemos hacer trabajar al técnico que nos arregla las luces de los pasos o las baterías, etcétera, y luego no poder pagarles.

¿Se sienten abandonados?

— ¿Que si estamos dejados de la mano de Dios? Pues sí, porque en cualquier sitio que miremos, aunque la actividad como tal de cada Semana Santa no sea comparable, la financiación es mayor, apenas tenemos apoyos. Por ejemplo, mientras nosotros el año pasado sacamos entre todas las entidades, entre Comarca de La Hoya y Ayuntamiento de Huesca 4.000 euros, en Cuenca el Consistorio facilitó a los organizadores de la Semana Santa 60.000 euros y la Diputación 30.000 más. En Teruel, el Ayuntamiento aportó 29.000 euros para este fin el año pasado y el anterior. Si nos vamos a Barbastro, que son 17.000 habitantes, la cifra ronda por los 19.000 euros. En Zaragoza, la Junta de Cofradías recibe 55.000 euros.

¿Qué supondría que la Semana Santa de Huesca fuera declarada como Fiesta de Interés Turístico Nacional?

—Es algo que perseguimos desde hace tiempo, pero es una cosa de la que deben tirar los ayuntamientos. Conseguir esta distinción supone unas apariciones en medios y revistas nacionales.

¿Para cuándo podría estar listo el Museo que quieren poner en marcha?

— Llevamos muchos años con este tema y ha visto la luz ahora. Desde 2012 estamos en conversaciones con el Ayuntamiento, y ahora hay visos de que se pueda ubicar en un aparte del actual edificio del Parque de Bomberos, una vez que se trasladen al nuevo Centro de Emergencias y Seguridad Ciudadana de Huesca. El señor alcalde anunció durante el último pleno que, si sigue en el cargo tras las elecciones del 28M, mantendrá su compromiso de cedernos este espacio, pero habrá que ver si esto finalmente es o no factible.

La Archicofradía, guarda y conserva los 22 pasos de la Semana Santa oscense, ¿cómo hacen esta labor?

— Aquí tenemos que defender un patrimonio que para una Semana Santa como la de Huesca, una ciudad de 53.000 habitantes, es importantísimo. La inmensa mayoría de los pasos tienen más de un siglo. Estamos procesionando algunas imágenes del siglo XVII y XVIII, que tienen un gran valor. Es un patrimonio que es de la Archicofradía, del Obispado, pero que pertenece a todos los oscenses.

¿Qué restauraciones se han realizado este año?

Hemos arreglado el palio de La Dolorosa, sacando los varales para cromarlos y cambiando la tela. También hemos recuperado un estandarte y, simplemente con estas cuestiones, subimos ya a los 5.000 euros. También, en la iglesia de Santo Domingo, vamos a trasladar de capilla al Cristo Yacente porque estaba en un sitio que prácticamente no se veía. De paso vamos a someterlo a una limpieza, a acondicionar la otra capilla y colocaremos en ese altar la imagen de La Soledad. Poner a punto esto y restaurar estas piezas nos va a subir a 10.000 euros. Hay que manejar mucho dinero para mantener esto en condiciones. Todos los años hay goteras en muchas cosas.

No es muy alentador este panorama que plantea, ¿cómo ve el futuro de la Semana Santa de Huesca?

—Entiendo que nos van a apoyar más. Hay una cierta inquietud y compromiso con el alcalde de solucionar esto, pero la verdad es que llevamos así muchos años. Lógicamente, nosotros justificamos hasta la última peseta de cada subvención, no es que nos den un dinero a fondo perdido. Y ojo, hacemos y vendemos Huesca muchísimo. Más del 30 % de los programas que hacemos se dan al Ayuntamiento que los reparte en la Oficina de Turismo. Le devolvemos así la subvención que nos da, mal asunto.

¿Qué diría a las instituciones?

—Hay que potenciar la ciudad. No creo que esté todo el mundo equivocado cuando en todos los sitios apoyan de una forma muy clara la Semana Santa, y aquí no.

¿Qué destacaría de la Semana Santa de Huesca?

—Sobre todo nuestro patrimonio y también la participación de oscenses y los miles y miles de personas que hay en las aceras y en los balcones, que respetuosamente están atentos al paso de la procesión. Y las diferentes actividades que se realizan por toda la ciudad o en algunos pueblos de la comarca durante la Cuaresma. No hay que dejar de visitar desde hoy al 9 de abril, la exposición ‘Mi pequeña Semana Santa’, de Carlos Jalle. Además, este martes, en el Salón de Actos de la DPH, a las 19:30 horas, se proyectará la película ‘Llena de Gracias’. El día 29, en ese mismo espacio y a la misma hora, habrá un concierto de la Banda de Música de Huesca y el día 30 Gloria Ruiz impartirá la conferencia ‘Esenios: La comunidad que ocultaba los manuscritos del mar muerto’.

¿Cuál es el momento más emotivo para usted?

—Esto es muy personal, cada uno vive con intensidad su Semana Santa. Yo me quedo con dos momentos. Uno es el encuentro del Cristo del Perdón y La Dolorosa en la madrugada del Jueves al Viernes Santo delante de SanPedro. El segundo, el final de la procesión del Viernes Santo, la entrada del Cristo Yacente en la iglesia, algo que la mayoría de la gente desconoce.

Para terminar, ¿lanzaría algún llamamiento a los oscenses?

— Tenemos que defender y conservar un patrimonio que es de Huesca. El apoyo económico, de quien quiera colaborar, sería extraordinario. No queremos hacer grandes inversiones, pero hace falta un mínimo para poder salir a las calles.