Huesca

TRÁFICO

La Marcha Cicloturista pide la coexistencia pacífica en calles

Un centenar de ciclistas, récord del acto, ha participado este domingo en el primer acto de la Semana Europea de la Movilidad

Isabel Ferrer, primera aragonesa en acabar la París-Brest-París, ha leído el manifiesto.
Silvia Ferrer, primera aragonesa en acabar la París-Brest-París, ha leído el manifiesto.
Javier Navarro

Seguridad y respeto han sido las dos demandas básicas de la Marcha Cicloturista que, organizada por el Club Ciclista Oscense en colaboración con DPH y Ayuntamiento oscense, ha dado el pistoletazo de salida a la Semana Europea de Movilidad en Huesca.

Un centenar de ciclistas, un número récord para la Marcha Cicloturista y llegado de casi toda la provincia e incluso en menor número de Zaragoza, ha participado en el recorrido entre Huesca y Ayerbe, con regreso a la capital altoaragonesa. Unos 60 kilómetros que han arrancado tras la lectura de un manifiesto en el que Isabel Ferrer, primera aragonesa en completar la París-Brest-París, ha recalcado que todos los usuarios de las vías públicas (vehículos a motor, ciclistas, peatones, patinetes...) “estamos llamados a respetarnos para prevenir los accidentes”.

Al respecto, ha enfatizado la necesidad de que todos respeten las normas de circulación -también los ciclistas, ya que “en ocasiones” no lo hacen- y de tomar “conciencia de la necesidad de que todas las formas de transporte pueden convivir pacíficamente tanto en la carretera como en nuestras ciudades”.

El manifiesto ha incidido en que se debe continuar el debate para incluir una mejora en la protección especial de los ciclistas, al ser una pieza “vulnerable” y “a menudo desprotegida” frente a los vehículos a motor.

“Es preciso seguir implementando medidas de infraestructuras ciclistas, estudios de puntos negros, otras leyes más actualizadas y, sobre todo, mucha educación vial desde el colegio”, ha reclamado Ferrer.

La educación propiciará que “los conductores tengan mayor conciencia de que un coche no es un juguete y puede convertirse en artefacto de muerte si no se conduce con responsabilidad y prudencia”.

Medidas concretas que el Club Ciclista ha pedido que se respeten fueron los 1,5 metros de distancia entre coches y ciclistas, el refuerzo de los controles policiales los fines de semana, festivos y domingos por la mañana, y la mejora de las vías, ya que “en ocasiones, los arcenes, cuando existen, están intransitables”.

“Protección al más débil” en cada situación

Tras la carrera, el vicepresidente del Club Ciclista, José Manuel Ballarín, ha incidido en la necesidad de proteger en cada momento al usuario “más débil” de la vía, que son, por orden, peatones, ciclistas y vehículos a motor. “Es la pirámide de protección que todos debemos tener clara”, ha expuesto.

En cuanto a la reorganización de los carriles bici en la ciudad, ha apuntado que hay algunos que son “muy necesarios” para facilitar la movilidad y calificó de “innegociable” que los vehículos a motor respeten el máximo de velocidad, lo que “facilitaría mucho el uso de la bici” y brindaría seguridad a todos los usuarios.

La Semana de Movilidad continúa el viernes con la celebración del día sin coches.