Huesca

reservas hídricas

Vadiello casi triplica la reserva de agua en tan solo un mes

El pantano almacenaba la semana del 20 de octubre 2,3 hectómetros, mientras que ahora supera los seis

El aumento en Vadiello es notable tras las lluvias de noviembre.
El aumento en Vadiello es notable tras las lluvias de noviembre.
Laura Ayerbe

Con más de seis hectómetros cúbicos de reservas y tendencia estabilizada. Esta es la situación actual del embalse de Vadiello, del que se abastecen 70.000 personas de 17 municipios, entre ellos Huesca capital; un pantano que en menos de un mes casi ha triplicado la escasa agua que acumulaba en sus laderas gracias a las intensas lluvias que dejaron el paso de borrascas como Ciarán y Domingos. La tendencia no es exclusiva. Casi todos los pantanos de la provincia, a excepción de la zona más oriental (Canelles y Santa Ana) han tenido una recuperación espectacular en el último mes pasando algunos, como Yesa, del 30 al 80 % de llenado.

El agónico arranque otoñal cambió en solo unos días. De tomar las primeras medidas por parte del Ayuntamiento de Huesca, a recuperarse en tan solo dos semanas. El embalse en la cabecera del Guatizalema ha subido hasta el 40 % de su capacidad en el último mes, aunque la recuperación se forjó, sobre todo, en 15 días entre final de octubre y el arranque de noviembre.

La nueva situación en la que se encuentra, con 6,1 hectómetros cúbicos, da un respiro en la Hoya de Huesca tras un segundo verano y un mes de septiembre hastiados por la sequía. Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), el crecimiento hasta casi triplicar sus reservas fue, sobre todo, tras el paso de las borrascas Ciarán y Domingos. En solo siete días, se llegaron a ganar 2,25 hectómetros.

Con esta nueva situación, el Ayuntamiento ya ha levantado las restricciones que estableció a principio de octubre. Y es que Huesca, que aglutina 55.000 de los 70.000 habitantes que se abastecen de Vadiello (aunque la ciudad tiene una toma de emergencia del canal del Cinca que lleva meses utilizando), tuvo que decretar el estado 2 de alerta por la pertinaz sequía. Lo hizo cuando el embalse bajó de tres hectómetros y ante una previsión nada halagüeña: ni una borrasca en el horizonte que pudiera descargar en el Alto Aragón. Así, el consistorio decretó el baldeo y limpieza exclusivamente desde pozos de agua y el cierre de las fuentes, entre otras. Y una vez más se volvió a hacer un llamamiento a la población para hacer un uso responsable de un bien tan preciado.

Pero la segunda quincena de octubre llegó con agua, con mucha agua. Tanto que el pantano ha conseguido recuperarse y situarse en cifras que el año pasado ni alcanzó, más de 6 hectómetros. Aunque la mejora es notable, el embalse sigue, tras dos años de hastío, por debajo de la media. Para el mes de noviembre, según los estudios del Centro de Estudios Hidrográficos del Cedex está en 9,5 hectómetros.

¿Montearagón?

De Vadiello se abastecen un total de 17 municipios que suman, entre todos, 48 núcleos y 70.000 habitantes. No obstante, Huesca, que aglutina casi el 80 % de la población ha tenido que suministrarse del canal del Cinca, de Valdabra, gracias a una traída de aguas de emergencia realizada en 2005, con otra de las grandes sequías que amenazó a Huesca de quedarse sin agua de boca. Del proyecto de traída de agua desde el pantano de Montearagón, nada se sabe, a pesar de que a finales de agosto de 2022 se anunciaron 22 millones, hace ya catorce meses. Esta anhelada obra, que garantiza el suministro actual y el futuro de la ciudad así como su desarrollo industrial, suma ya dos décadas de retraso.