Luz verde a la implantación de la jornada de 35 horas en el Salud

La Mesa Sectorial de Sanidad aprobó este lunes la implantación progresiva de la jornada laboral de 35 horas hasta 2026 para todo el personal del Servicio Aragonés de Salud, en torno a 24.000 trabajadores. La gerente del Servicio Aragonés de Salud (Salud), Cristina Castillo, aseguró que están “muy satisfechos” con el resultado de esta primera Mesa Sectorial de Sanidad de la legislatura.

Castillo explicó, en declaraciones a los medios de comunicación, que han respetado lo firmado con los sindicatos en el pacto anterior y que lo que hicieron este lunes fue ratificar ese acuerdo previo que, no obstante, sigue contando con el rechazo de las organizaciones Cemsatse y FTPS. Así, se ratificó que dicha reducción de la jornada laboral se va a aplicar de forma gradual en los próximos tres años, lo que “nos va a permitir realizarlo con la mayor calidad y asistencia a todos los aragoneses”, señaló.

En ese sentido, Castillo remarcó que “no es lo mismo” aplicar las 35 horas semanales en una administración pública, que puede funcionar de 08:00 a 15:00 y cierra los fines de semana, que en el Salud, donde se atiende a los pacientes durante las 24 horas del día y los 365 días del año

Por su parte, Cemsatse, que engloba a los sindicatos CesmAragón y Fasamet de personal médico y Satse de enfermería, mostró su “frontal rechazo” a la propuesta del Salud y consideró una “discriminación injustificable” con el resto de funcionarios autonómicos que se implante de manera progresiva la jornada de 35 horas. “Supone una falta de consideración intolerable tratar de forma distinta a un empleado público del Pignatelli que a uno que trabaja en un hospital o centro de salud”, añadieron.

Desde esta organización recalcaron que las 35 horas semanales se aplican ya en 14 comunidades autónomas y calificaron de “decálogo de la vergüenza” el acuerdo firmado entre el Salud y el resto de sindicatos.

Por otro lado, la Mesa Sectorial de Sanidad aprobó la Oferta de Empleo Público (OPE) de 2023, que cuenta con un total de 1.020 plazas, que incluyen la tasa de reposición, 850 plazas, y un 20 % adicional de puestos vacantes, 170. Esta oferta, una vez aprobada, se debe convocar en un plazo de tres años. Dentro de estas plazas, se han incluido 168 de Atención Primaria, 151 de medicina familiar y comunitaria y 17 de pediatría, ocho de médicos de urgencia hospitalaria, nueve de médicos de urgencias y emergencias extrahospitalarias y dos para médicos de los servicios de admisión y documentación clínica. Las 833 plazas restantes se reparten entre aspirantes de 37 categorías profesionales, entre las que destacan las 282 plazas de enfermería o las 120 de facultativo especialista de área. Igualmente, se pactó la regulación provisional de los permisos por fallecimiento y por enfermedad grave o intervención quirúrgica de familiares, con mejoras. Por último, la gerente también adelantó que se va a trabajar para modificar los criterios de la bolsa de empleo de facultativos especialistas de área.