Perfumería Compairé, adiós a un clásico del comercio de Huesca

Ascensión Bergua dice que se dejó “engañar” por su marido al poco de casarse para empezar a trabajar hace ya 42 años en el negocio familiar, y en todo este tiempo, mientras él se encargaba de la botica ella se ocupó de la parte que incluía las secciones de droguería, fotografía y perfumería de farmacia Compairé. Si bien nunca se ha arrepentido de tomar esta decisión.

Este jueves ha sido su último día de trabajo y mientras empaquetaba las últimas cosas reconocía que lo estaba viviendo con sentimientos encontrados. Admitía que le daba “mucha pena”, pero también se sentía feliz “de poder volver siempre que quiera” ya que sus hijos han tomado el relevo familiar y siguen al frente del negocio.

También mostraba su satisfacción ya que después de tanto tiempo, “muchos clientes se han convertido en amigos”. Y destacaba que tras sus mostradores ha atendido “a familias enteras que han seguido viniendo una generación tras otra”.

En todos estos años ha visto como “cambiaba la forma de comprar” y lo que ha supuesto la venta online y lamentaba el tiempo que tuvieron que estar cerrados como consecuencia de la pandemia. Y también “lo que costó volver a la normalidad ya que a la gente le costó retomar sus rutinas”.

Añadía que “ahora es el momento de que los hijos tiren del carro y de dejarles su espacio”. Y es que Ignacio y Alberto hace tiempo que fueron cogiendo responsabilidades en la farmacia, mientras su padre se iba apartando y ambos son ya la cuarta generación.

Y mientras ella recogía los pocos artículos que habían quedado sin vender, sus hijos ya están haciendo planes para ampliar la farmacia y poder contar con más espacio en el que “los productos tengan más visibilidad, y haya una zona de recepción de pedidos, un despacho más grande y sobre todo se dé un mejor servicio”.