Huesca

religión

La Catedral acoge este domingo una eucaristía presidida por Vicente Jiménez

El nuevo administrador apostólico de las Diócesis de Huesca y Jaca ofrece una misa, a las 18:00 horas

Vicente Jiménez Zamora, nuevo administrador apostólico de la diócesis de Huesca
Vicente Jiménez Zamora, nuevo administrador apostólico de las diócesis de Huesca y Jaca.
S. E.

La Catedral de Huesca acoge este domingo, 7 de enero , a las 18:00 horas, una eucaristía presidida por el arzobispo emérito de Zaragoza, monseñor Vicente Jiménez Zamora, que ha pasado a ser administrador apostólico de Huesca y de Jaca, durante el tiempo en que las dos diócesis permanezcan en sede vacante, a la espera de un nuevo obispo propio.

Por su parte, monseñor Julián Ruiz Martorell ha pasado a ser obispo de Sigüenza-Guadalajara, tras más de 12 años al frente de las dos diócesis oscenses.

Así, monseñor Vicente Jiménez Zamora es el segundo administrador apostólico de las diócesis de Huesca y de Jaca desde que ambas quedaron unidas, aunque independientes entre sí, el 23 de octubre de 2003.

Vicente Jiménez Zamora ha señalado que el periodo de Sede Vacante “no debe ser un tiempo de inmovilismo pastoral ni de paro encubierto, la vida eclesial sigue y hay que realizar los Planes Pastorales Diocesanos en marcha”.

El pasado 5 de enero, el nuevo administrador apostólico, de manera privada, realizó la profesión de fe y el juramento de fidelidad ante el Colegio de Consultores de la Diócesis. Al conocer su nombramiento hace unos días, Vicente Jiménez Zamora manifestó sus sentimientos de “profunda gratitud” al Papa Francisco, por la confianza depositada en su “humilde persona” al nombrarle Administrador Apostólico, durante el tiempo en que las dos Diócesis permanezcan en Sede Vacante, en la espera de un nuevo Obispo propio. Y apuntó que el nombramiento le causó “sorpresa”.

“Me encuentro en situación de Arzobispo emérito de Zaragoza, dedicado a una oración sosegada, al retiro silencioso y a tareas de menor responsabilidad. Consciente de mis limitaciones y de las cargas del oficio episcopal, apoyado en la gracia del Señor, he aceptado este nuevo servicio con espíritu de obediencia apostólica y disponibilidad pastoral”, señaló el religioso.