La Alegría Laurentina pide al Ayuntamiento licencia de local de ocio para poder abrir el Jai-Alai

La Peña Alegría Laurentina pide al Ayuntamiento de Huesca que se reconozca al mítico Salón Jai-Alai, su cuartel general, como local de ocio para poder reabrir estas instalaciones clausuradas desde el mes de octubre por orden municipal.

Sus miembros rechazan por completo la idea de solicitar una licencia de hostelería para retomar su actividad, tal y como les plantean desde el Consistorio oscense, porque “no les corresponde” y “no piensan lucrarse”, según ha indicado este sábado Javier Ibarz, presidente de Alegría Laurentina.

Cabe recordar que el pasado mes de octubre el Ayuntamiento comunicó a la Alegría Laurentina el cierre provisional del Jai-Alai por carecer de licencia ambiental de actividad clasificada en un proceso de revisión de permisos de locales de la ciudad iniciado por el nuevo equipo de gobierno municipal del Partido Popular.

La Alegría Laurentina ha celebrado este sábado una concurrida asamblea en la que se ha puesto sobre la mesa este asunto para buscar soluciones como la de pedir al Consistorio que “replantee, valore y estudie su postura” y les permita ser local de ocio. “¿Para qué queremos una licencia de hostelería? ¿Para lucrarnos? ¿Para trabajar 365 días al año? Una licencia así te permite realizar una explotación, dejas de ser una peña y te conviertes en un empresario”, ha explicado.

Y ha añadido que los eventos que ofrece a la ciudad y a sus socios la Alegría Laurentina se hacen “por amor al arte”, ya que se trata de una asociación sin ánimo de lucro que realiza eventos puntuales, y que la peña no puede hacer cargo de elevado coste que implica una licencia de hostelería.

“Nosotros nos estamos basando en una ordenanza de local de ocio que es del propio Ayuntamiento de Huesca. Nos meten en una ordenanza de la hostelería que no nos corresponde ni por asomo”, ha aseverado Javier Ibarz.

“La gente tiene que ser consciente de que se nos está encaminando a un sitio que no es ni constitucionalmente correcto, ni más ni menos”, ha manifestado aludiendo a que se están vulnerando por ejemplo sus derechos de reunión. “¿La peña de un pueblo, por ejemplo, necesita de una licencia ambiental clasificada? Otra cosa es una autorización de local de reunión, eso sí nos corresponde. Nuestro local es seguro y no vemos dónde está el problema”, ha remarcado finalmente.