Un protocolo “pionero” contra
la mutilación genital femenina

Acercarse a la preadolescencia, coger un vuelo de vuelta al país de origen con la familia y volver mutilada genitalmente. Para evitar que esto ocurra, Gobierno de Aragón y Médicos del Mundo llevan poniendo en práctica desde hace años un protocolo desde los ámbitos sanitario, educativo y de Servicios Sociales. Este martes, con motivo del Día Internacional de la Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, Médicos del Mundo ha instalado una mesa informativa en la plaza Navarra de Huesca para concienciar a los oscenses.

Se calcula que alrededor de medio millón de mujeres que viven en Europa han sufrido este brutal ataque contra sus derechos más básicos. En la provincia, según ha declarado Margarita Alfaro, voluntaria de Médicos del Mundo, no se tiene constancia de ningún caso desde que empezó a aplicarse el protocolo.

Aragón fue una de las comunidades “pioneras” en contar con una estrategia contra esta práctica ancestral que se da sobre todo, pero no solo, en el África subsahariana.

Alfaro ha explicado que una familia con una niña en estas edades que quiera viajar a uno de los cerca de 30 países donde aún se practica la mutilación genital femenina, debe ir antes del viaje al pediatra, que hará una revisión a la menor. Los padres deben firmar un compromiso firmado y, tras regresar, hay otra revisión y si se observan cambios, se pone en marcha la parte legal del protocolo.

Julia Moreno, trabajadora social de Médicos del Mundo, ha detallado que la mutilación genital femenina está castigada con entre 6 y 12 años de cárcel para los padres y puede conllevar la retirada de la tutela y de la patria potestad.