Huesca

AGUA

Un acuífero de un garaje pierde 122.021 metros cúbicos al año

Vecinos de Vicente Campo piden al Ayuntamiento que actúe, si bien Medio Ambiente habla de un problema de cimentación

El agua se derivan al sistema de alcantarillado mediante el uso de auto bomba.
El agua se derivan al sistema de alcantarillado mediante el uso de auto bomba.
S.E.

Los 33 vecinos del número 9 de la calle Vicente Campo llevan dos décadas padeciendo un problema que empezó “hace 20 años cuando hicieron nuevas obras en la calle”, las viviendas se construyeron en 1968 y en su primera época no hubo ningún acuífero en el garaje en el que actualmente se descargan “122.021 metros cúbicos de agua al año que se derivan al sistema de alcantarillado mediante el uso de auto bombas”, indica Vicente Valdivieso, el vicepresidente de la comunidad que afirma además, que “se trata de un despilfarro que la ciudad no se puede permitir”.

Debido a este problema la comunidad de propietarios ha tenido que instalar “tres bombas dentro del garaje” con el consiguiente gasto que supone para los vecinos “tener en marcha todos los días, durante las 24 horas, el grupo electrónico que las mantiene”, y matiza el vicepresidente que al coste de la energía “se suman las reparaciones, las revisiones de mantenimiento y otros añadidos”.

En estos años también han padecido, “dos inundaciones tremendas” , debido a las cuales tuvieron que acudir varios camiones bomba a sacar el agua.

Entre las propuestas que han hecho a las distintas corporaciones, y que no han sido consideradas, estaba la de construir un depósito que pudiera generar una reserva de agua para tres días y con ello ahorrar en el gasto, si bien el Ayuntamiento desestimó la inversión de esta infraestructura por falta de dinero.

También han planteado que el agua sobrante se destine a uno de los estanques del Parque Miguel Servet, cuyo sistema de riego se nutre de tres pozos, y de este modo no se acaben mezclando con aguas negras. Y han sugerido que para poder realizar estos proyectos se acuda a fondos europeos o ayudas similares, si bien no se han llegado a ejecutar estos planteamientos.

Detalla que en los últimos años se han dirigido a todos los Consistorios en repetidas ocasiones, pero, dicen no haber recibido “ninguna respuesta de acción por parte de las autoridades locales”, y denuncia de que este acuífero no solo representa “un desperdicio de un recurso tan preciado como el agua, sino también una amenaza ambiental seria”.

Valdivieso apela a la actual alcaldesa y le recuerda que al asumir el cargo “manifestó su compromiso con la resolución de problemas ambientales”, y para abordar este problema han pedido en varias ocasiones reuniones tanto con la primera edil como con el concejal de Medio Ambiente, José María Veintemilla. Y teme que se repita lo sucedido con los anteriores equipos de Gobierno Municipal, a los que junto a la presidenta de los vecinos remitieron “repetidas instancias a Fernando Elboj, Luis Felipe y Ana Alós, que no fueron atendidas” y considera que en este tiempo “la dejadez política” ha sido constante.

Además se muestra dispuesto a “reclamar daños y perjuicios” por este problema que se mantiene en el tiempo.

Consultado por este periódico, José María Veintemilla lamenta el problema que sufren los vecinos, si bien explica que “cuando se construyó el edificio no tuvieron en cuenta que por debajo del parque hay una zona inundable” y agrega que “el tema de la cimentación fue complicado y tuvieron que duplicar espacios para sujetar el agua que había”. Añade que en su momento se planteó realizar “una obra a través de la cual atravesando Vicente Campo se llegue a las pistas de patinaje para hacer un gran depósito que permita captar estas y otras aguas del entorno”, pero de momento, apunta, “no se cuenta el dinero necesario para acometerlo” y recuerda que además sería complejo “por tratarse de una propiedad privada”. Pero, remacha, que “para el área de Medio Ambiente es una de las cuestiones que está encima de la mesa y se espera que en un futuro más o menos cercano podemos acometer la obra”.