Huesca

125 ANIVERSARIO DE LA CÁMARA DE COMERCIO Y SERVICIOS DE HUESCA

María Jesús Sanvicente: “Me duele en el alma cada comercio que cierra en Huesca”

Regenta La Confianza, el ultramarinos más antiguo de España y Europa

María Jesús Sanvicente, responsable de Ultramarinos La Confianza.
María Jesús Sanvicente, responsable de Ultramarinos La Confianza.
Laura Ayerbe

Ultramarinos y Bodega La Confianza es uno de esos comercios de los de “toda la vida” que hacen brillar la ciudad de Huesca. Desde 1871 en la capital altoaragonesa, el establecimiento presume de ser el más antiguo conservado en España y Europa. El secreto de este éxito, afirma María Jesús Sanvicente, su responsable, es en un cincuenta por ciento “las personas que se acercan hasta aquí y hacen que tenga vida todos los días” y el otro cincuenta “los que estamos detrás del mostrador e intentamos responder a esa demanda lo mejor que sabemos con nuestro espíritu de servicio y con vocación”.

A la par que nació la tienda, en el siglo XIX, lo hizo la Cámara de Comercio de Huesca, un hecho que Sanvicente recuerda y celebra por su labor de mantener “vivo” el comercio. Desde sus inicios, La Confianza se ha adaptado a los cambios que ha traído consigo el mercado en lo relativo a los hábitos de consumo. Responde así a la demanda actual ofreciendo el producto dirigido a su clientela fundamental, el público turista, además de mantener la especialidad de la tienda para el cliente “leal” de Huesca como el bacalao, las especias o las legumbres. Así, en sus 153 años de historia, el comercio mantiene su esencia en la decoración y evoluciona en la medida en la que lo hace la sociedad. También se ha superado en los momentos más difíciles cuando la pandemia asoló la ciudad, España y el mundo. “Fueron momentos muy difíciles. Nos adaptamos, y como pudimos, ofrecimos servicio a domicilio”. “A veces aguantar supone darle cariño al comercio, un espíritu de servicio, atender a los clientes y entablar con ellos una comunicación casi familiar”.

Sobre la evolución del número de tiendas locales en la ciudad reconoce: “me duele en el alma cada comercio que cierra. La ciudad está viva si los comercios están vivos. Damos seguridad, luz, riqueza, servicio...”. Al fin y al cabo, añade, “conoces una ciudad por sus monumentos, por su historia, pero esta también por sus tiendas”. Por ello, en un día como hoy, subraya la labor de la Cámara de Comercio de Huesca, un motor de movimiento “indispensable” que respalda a las pequeñas y medianas empresas, una cuestión “prioritaria”. Una labor que conoció María Jesús de primera mano cuando formó parte del pleno y de la que dice “está en manos de auténticos profesionales”.