El oscense Alberto Santolaria, todo un ‘hacha’ de la Física

La pasión por la Física del joven oscense Alberto Santolaria Santamaría, de 17 años y alumno del IES Ramón y Cajal de Huesca, es cosa de familia. Su padre, Eduardo, ingeniero de profesión, le ha apoyado tanto en esta materia que el joven Alberto, que cursa 2º de Bachiller, ya ha cosechado alguno logros. Atesora, por ejemplo, una medalla de bronce que ganó en las Olimpiadas Españolas de Física, celebradas en Granada del 4 al 7 de abril, y aunque no se considera un ‘cerebrito’ admite que le van los números. “Me gusta la Física, aparte de que se me da bien. Descubrí que se celebraba una Olimpiada y me la preparé un poco y me salió muy bien”, indica.

Alberto Santolaria cuenta también que vivió con “mucha emoción” la recepción en la Sala de Columnas del Edificio Pignatelli, sede del Ejecutivo autonómico, en la que el presidente de Aragón, Jorge Azcón, le felicitó por sus logros. También estaban presentes sus compañeros Javier Badesa Pérez, estudiante del I.E.S. Leonardo de Chabacier de Calatayud; y Adrián Ligorred Obedé, alumno del I.E.S. Gallicum de Zuera, que se alzaron con otras dos medallas en las Olimpiadas Españolas de Física.

“Fue una experiencia distinta y me hizo bastante ilusión que se reconociera mi esfuerzo”, comenta este joven y brillante alumno. Para los compañeros de clase de Alberto en el IES Ramón y Cajal fue “una sorpresa” que lograra esta medalla. “Todos me han felicitado y me han dado la enhorabuena”, apunta.

En su opinión, la Física “es complicada, pero al final, si la afrontas poco a poco, es como una escalera en la que vas aprendiendo más cosas. Así, las que antes te parecían difíciles, luego son más fáciles y consigues un progreso”.

Para ser como él, un ‘hacha’ en Física, hay que tener, al menos, interés. “Obviamente, necesitas que se te dé un poco bien para que te guste y cojas la marcha”, valora.

Una vez que acabe sus estudios en el instituto, el curso que viene, “probablemente”, Alberto se matriculará en el Grado de Física en la Universidad de Zaragoza. De momento, no tiene claro si le gustaría dedicarse a la docencia o a la investigación, pero el tiempo dirá. En cualquier caso valora positivamente las palabras de Jorge Azcón, quien manifestó el interés de su Ejecutivo por apoyar a los alumnos más brillantes de Aragón. “Si se potencia el talento, los estudiantes se esforzarán más, trabajarán para obtener buenos resultados más motivados”, comenta.

A quienes tengan algo de ‘miedo’ a la Física les aconseja que vayan “aprendiendo lo básico para ir subiendo de nivel poco a poco. Es algo que cuesta, pero se puede sacar”.

Y, por último, también tiene unas palabras para su padre que es “quien más” le ha ayudado para brillar tanto en el mundo de la Física.