Huesca

CULTURA

El Perpetuo Socorro de Huesca se convierte en un museo al aire libre

Barrio Fest concluye con una ruta guiada por los nuevos murales de este año y una selección de ediciones anteriores

Una d elas paradas de la ruta de las murales de Barrio Fest.
Una d elas paradas de la ruta de las murales de Barrio Fest.
Verónica Lacasa

Barrio Fest se ha despedido este martes hasta el año que viene reivindicando la cultura en la calle y el orgullo de pertenencia al barrio Perpetuo Socorro, con su diversidad como bandera. Un recorrido por los nuevos murales pintados ha congregado a un buen número de personas en un itinerario que también se ha detenido en algunas de las obras realizadas en ediciones anteriores y que han hecho de una veintena de fachadas una exposición al aire libre.

Edgar Camarero (o Gozar), el organizador y promotor del evento a la par que artista, ha guiado este periplo por el barrio, que ha finalizado, en colaboración con el proyecto Crece de Cruz Roja, con la plantación de un árbol junto con una cápsula del tiempo con los deseos del barrio.

La decena de obras en las que se ha detenido este martes la ruta por los murales plasman el espíritu del barrio, reivindicando sus valores, pero sin ocultar sus problemas. En este sentido, una de las primeras paradas ha sido una obra de Bhurton de ediciones anteriores con el lema “Tenemos derecho a ser escuchados”, una clara alusión a la indiferencia con las que muchas veces se han encontrado las peticiones del barrio en las instituciones.

La ruta ha comenzado junto a la Asociación de Vecinos con una “escena costumbrista” de Gatta y Gozas en la que un niño corre con perros y “representa la libertad y el juego en la calle”.

En el cruce de las calles Pío XII, Gibraltar y Aragón, una nueva obra de Helen Bur sobre las “mayores cargas del sistema” que soporta la mujer. La del mural, aún con aros en cuello y brazos, ya está rompiendo esas cadenas.

Con “Solo el barrio mueve el barrio”, en Zacarías Martínez, el colectivo CTP Crew de Fraga, con una imagen cercana al constructivismo ruso, lanza un mensaje directo a partir de unas casas unidas entre sí por engranajes.

Loco 13, Chome y Barok realzan la paz, amor y unidad del hip hop, también del barrio, a la vez que reivindican la multiculturalidad con un estilo tribal y personas de diferentes orígenes.

Y a la altura del número 45 de Ramón y Cajal, Marta Alonso plasma “la fuerza” y la capacidad de las mujeres en trenzar “tejido social” con dos féminas con formas de criaturas mitológicas.