Huesca

sanidad

La provincia tiene 100 médicos menos que antes de los recortes

La cifra se mantiene los últimos años pero es insuficiente, denuncia el Colegio

Hospital Universitario San Jorge de Huesca.
Hospital Universitario San Jorge de Huesca.
Laura Ayerbe

La supuesta joya de la corona, la sanidad pública, luce cada año más desgastada. Los médicos en activo en la provincia altoaragonesa (858) son casi un centenar menos de los que había en 2008, antes de que los socialistas y después los populares se dedicaran a los recortes promovidos por la UE. Según estadísticas del INE correspondientes a 2023 -las más recientes-, hay en la provincia 858 médicos en activo, 89 menos que en 2008 (un 9,4 por ciento menos).

Y aunque en los últimos años la cifra se ha estabilizado en torno a los 860 médicos en activo, las previsiones para los próximos años no son nada buenas: uno de cada cuatro facultativos tiene entre 55 y 64 años (es decir, en menos de una década 283 llegan a la jubilación). Los colegios de médicos de España, incluido el de Huesca, llevan advirtiendo desde los años 90 del envejecimiento del sector y de la falta de relevo generacional. Todos sus avisos han caído en saco roto, recuerda el presidente del Colegio de Médicos de Huesca, José María Borrel.

Cada vez más médicos cerca de jubilarse

El porcentaje de médicos de 55 años o más ha crecido notablemente desde 2003, año en el que solo el 7,67 por ciento de los galenos tenía entre 55 y 64 años y otro 2,20 por ciento estaba entre los 65 y 69 (los médicos pueden alargar su jubilación). Este 2023 esos porcentajes han escalado considerablemente, hasta el 24,5 y el 20,52 por ciento, respectivamente. Del 9,87 entre ambos grupos de edad (55 a 64 y 65 a 69 años) al 45,02 por ciento en dos décadas.

En el mismo intervalo, el porcentaje de médicos de menos de 35 apenas ha crecido algo (del 9,77 al 12,81 por ciento) y el de facultativos entre los 35 y los 44 incluso ha retrocedido desde 2003 (del 29,62 al 13,07 por ciento). Borrel llama la atención, otra vez, sobre la falta de relevo. Al hecho de que las facultades de Medicina oferten un número insuficiente para sustituir a los que se jubilan se suma que formar a un médico supone 11 años.

Con recortes -puntuales o más permanentes- en algunos centros de salud, sobre todo en el medio rural, y unos hospitales de la provincia -el de Huesca y Barbastro- donde el déficit de médicos ya se acusa sobremanera, las perspectivas no invitan al optimismo.

“No nos podemos echar las manos a la cabeza porque llevamos avisando desde los 90 y las autoridades se han dedicado a otra cosa”, recrimina Borrel a los sucesivos gobiernos.

El presidente también reitera un mensaje a la sociedad: “No nos sirve que nos paren por la calle (a los médicos) y nos pregunten ‘qué vamos a hacer’. Si hay mucha gente concienciada, que lo demuestre a través de sus partidos, asociaciones, sindicatos, que protesten y exijan. La voz y el voto es la única herramienta que tenemos, no pegar gritos en el centro de salud”, en alusión a unas agresiones a sanitarios cada vez más frecuentes.

“A costa de rebajar la calidad”

José María Borrel, presidente del Colegio de Médicos, coincide en que hay que tomar medidas urgentes para minimizar la falta de facultativos, pero quiere dejar claro que “todo lo que sea (que se decida), va a ser a costa de rebajar la calidad asistencial” llegados a este punto límite del sistema sanitario. Se refiere así a contratar a profesionales de otros países “con menos años de formación” o a “poner un enfermero donde había un médico, a un auxiliar donde había un enfermero...” o, un ejemplo reciente, el pliego del 061 “que quita los médicos de las ambulancias”. Borrel insta a las autoridades a que,“al menos, avisen” a la ciudadanía de que esas medidas suponen una menor calidad asistencial para que “todo el mundo sepa lo que hay”. Y remacha que “no todo es por la falta de médicos, también falta planificación”.