Opinión
Por
  • MAR RAMOS NAVARRO

La indiscreción

La discreción es un comportamiento de la persona, en el que aún teniendo conocimiento total de algún asunto determinado, es consciente de que la mejor postura posible es la de permanecer voluntariamente callada para no verse comprometida lo más mínimo.

En román paladino viene a ser -lisa y llanamente- una forma de atención pasiva de quién no quiere involucrarse para nada en el tema.

Por consiguiente, el concepto justamente opuesto como es el de la indiscreción, suele generar frecuentemente momentos tensos así como crear serios problemas y fuertes discusiones a la persona, precisamente por "meterse en lo que no le importa".

Así, mi amable vecino, trayendo a colación este término que nos ocupa, me cuenta que un niño lloraba a moco tendido en la puerta de su casa, cuando un señor le preguntó cuál era la causa de su llanto -sin duda que de buena fe y al objeto de ayudarlo- recibiendo la respuesta del niño entre sollozos de que había sido castigado por su padre por "meterse en lo que no le importa".

Y es que, a la vista de este caso tan real como la vida misma, que cada cual saque las conclusiones convenientes.