Opinión
Por
  • JOSÉ MARÍA BORREL MARTÍNEZ

Los hermanos juegan un papel fundamental en la vida de las personas con Síndrome de Down

Los hermanos juegan un papel fundamental en la vida de las personas con Síndrome de Down
Los hermanos juegan un papel fundamental en la vida de las personas con Síndrome de Down

El 21 de marzo volvemos a conmemorar el Día Mundial del Síndrome de Down, y este año desde Down España queremos resaltar el papel fundamental que juegan los hermanos en sus vidas.

Los padres nos llenamos de medallas al hablar de todo lo que hacemos, y aparecemos como los héroes de una película en la que realmente somos actores secundarios. Y quien sabe de cine sabe reconocer aquellos personajes que aparecen menos en escena pero en definitiva son la clave del film.

Los padres tienen la obligación de asumir el compromiso con los hijos que engendraron, y deben renunciar en ocasiones a muchas cosas en beneficio de ellos, tengan o no síndrome de Down. Sin embargo, los hermanos tienen la opción de escoger hasta dónde involucrarse, hasta dónde puede llegar su apoyo a los padres.

Ellos deben planificar su futuro y pensar a la vez en formar su núcleo familiar con la mayor libertad posible, sin interferencias de los condicionantes familiares. Ahora cuenta también la pareja con quien se estén haciendo planes.

Pues bien, aun partiendo de esta realidad, hay que reconocer que la mayor parte de las veces el hermano, la hermana, son tan importantes o más que los propios padres. Ellos sí que son sus grandes maestros, ya que tienen ese don excepcional de la naturalidad, lo que necesita su hermano, que aprende imitándoles.

Los padres tenemos que aprender lo que debemos enseñarle, y lo sabremos hacer o no, mientras que solo tienes que dejar a tu hijo con síndrome de Down con sus hermanos, y más pronto que tarde aprenderá por mimetismo.

Pero esto no es todo. Hablamos de la sobreprotección y sus efectos negativos. Procuramos evitarla pero siempre hay alguna discriminación positiva valorando el sobreesfuerzo que les supone, quizás debido al cortoplacismo en que nos movemos los padres, en donde lo vemos como un pequeño apoyo sin mayor importancia.

Sus hermanos piensan más a largo plazo y son conscientes en mayor medida de sus posibilidades, de las capacidades de su hermano con síndrome de Down. Y saben que son capaces y que para un futuro sin sus padres es positivo exigirles ahora. ¡Qué razón tienen!

Además, son sus mejores amigos, sus confidentes, sus aliados..., y por si fuera poco son tanto sus maestros tal como ya he indicado, como sus alumnos. La persona con síndrome de Down hace mejor persona a aquellos que le rodean, y sus hermanos de forma innata, desde el primer momento, conocen la existencia de otras personas, aparentemente diferentes, que deben abrirse hueco en una sociedad que les da más problemas que soluciones, que les exige mucho más que a la mayoría, en definitiva, que les dificulta hasta lo más básico de sus vidas.

Y de forma natural conviven con ellas, las observan y aprenden, adoptan sus valores, los transmiten hacia fuera, y crecen identificándose con las personas que presentan otras capacidades, sean las que sean, no solo con las que tienen el síndrome de Down, con un compromiso muy especial adquirido en ese intercambio de conocimientos y valores experimentado por su contacto diario. Todo esto explica el lema elegido este año "La suerte de tenerte", el cual se debe interpretar recíprocamente.

Es por esto en definitiva que uno de los pilares fundamentales de Down España es la "Red de Hermanos". No da hoy para traer anécdotas, experiencias o comentarios suyos, pero con su compromiso han demostrado que hay que dejarles pista libre en el proyecto de futuro de sus hermanos, y desde la primera línea, lugar que se han ganado por méritos propios luchando a su lado.