Opinión
Por
  • CARLOS GARCÍA MARTÍNEZ

Ciudadanos

Ciudadanos...y ciudadanas, se supone, aunque quizá sea mejor dejarlo, por si a alguno del trío no le gusta. Pero lo que no gusta a muchos, entre ellos a un servidor, es que el partido que podía haber hecho posible un pacto a la alemana, cerrado éste a todo trato razonable con la metástasis corruptiva del PP, sea ahora el partido que prende la mecha del frentismo. Que quién podía y debía impulsar un partido liberal en el sentido europeo para convertirse en árbitro de conservadores y socialdemócratas o, incluso en el propio partido mayoritario de la derecha, haya hecho reaparecer el fantasma de las dos Españas al manifestarse tan radicalmente dispuesto a trazar unas líneas rojas al partido socialista tras las próximas elecciones. Líneas rojas, por otra parte, que han viajado siete pueblos en apenas unos meses. Con ello, Rivera pretende sustituir un bipartidismo corregido por un frentismo "popular". Ningún otro líder político, y mírese qué cosas han dicho algunos, había prendido la mecha de la discordia como él.

Aun así, tengo la esperanza de que los resultados electorales y la presión de su militancia le empuje a recuperar el espacio de centro-derecha- liberal con el que salieron a la palestra española desde su origen catalán. Y pienso que cuanto mejor resultado electoral obtengan, mejor será para esa España constitucional que tanto citan, dejando atrás arriesgados vetos.

La sociedad catalana no independentista podría preguntarse también por qué ha limitado Ciudadanos hasta tal punto su presencia en la comunidad, habiendo sido el partido más votado en las últimas elecciones, pasando la patata caliente al Gobierno socialista y al PSC.