Opinión
Por
  • BERNARDO VICENTE CEBOLLERO

El jolgorio electoral

Mientras los políticos puedan abusar de la democracia, los ciudadanos serán mareados y engañados hasta lo insospechado. La primera necesidad político-social en esta saqueada y maltratada España, no es la educación del pueblo, es la instrucción, la elección y el control de nuestros políticos, los que deben dirigirnos en la obligación de convertir al pueblo en ciudadanía, tarea de gran responsabilidad y sacrificio, la cual resulta impensable de culminar con una clase política enroscada continuamente en sus miserias. Llevamos más de cuarenta años en democracia, eso dicen, y todavía bailamos aturdidos dentro de ella, por lo que ante el próximo "jolgorio electoral", los votantes deberíamos empezar a oponernos y no asistir a la celebración de mítines tal y como se vienen sucediendo, hay que exigir que los mismos se conviertan en interrogatorios del público a los políticos, que la iniciativa parta del pueblo y que los futuros electos respondan. Para imponerse, lucirse o avergonzarse, bastaría con los debates públicos entre miembros de las distintas listas electorales. Otra medida a considerar de inmediato, visto el desastre al que nos ha conducido el sistema bipartidista de gobierno/oposición, sería desviar votos de los partidos tradicionales hacia otros más recientes e imponer así un nuevo modelo, forzando a formar coaliciones para que se gobierne en permanente vigilancia entre coaligados, al menos hasta que la decencia domine la política. No nos podemos fiar de ningún clan político y menos de aquellos que no les disgusta o que pretenden romper la nación, ni de esos otros que hasta ahora han tenido el máximo de escaños.