Opinión
Por
  • ANTONIO LASHERAS

Sufrir tambien es parte de la vida

Debemos procurar ser felices cada minuto, porque no sabemos cuánto va a durar esta aventura terrena.

En la vida experimentamos una gran verdad que dice: "Si te mueves tú, el mundo se mueve contigo".

Y como siempre hay un reto que alcanzar en la vida, retos económicos, retos sociales, retos familiares, retos políticos y retos de salud.

En cada reto, se nos abren las puertas de la felicidad y del sufrimiento, de nosotros dependerá cuándo y cómo abrimos y cerramos las puertas. La puerta de la felicidad la deberíamos tener siempre abierta y la del sufrimiento siempre cerrada, ya que el sufrimiento nos entrará por la ventana y si nos descuidamos por la chimenea. Todos los retos que nos planteamos en la vida, necesitarán todo nuestro esfuerzo y buen hacer para conseguir los máximos beneficios. Pero no estamos solos y tenemos que competir y cumplir.

La competencia es como ese dolor de muelas que no nos deja descansar en paz y que nos empuja a producir más y mejor.

El cumplir quizá sea algo peor, ya que estamos obligados a cumplir normas y preceptos impuestos por terceras personas que miran mucho más por sus intereses que por los intereses generales.

Recuerdo una frase que nos decía mi madre cuando la vida se tornaba en dolor: "No hay bien que siempre dure, ni mal que nunca se acabe".

El bien y el sufrimiento siempre estarán unidos a nuestras vidas, con una premisa que nunca deberíamos olvidar: El bien nos lo hemos de currar y el sufrimiento nos llegará por los caminos más inesperados.

Un pequeño consejo para los que están tristes con los resultados de las últimas elecciones: "Escoger un camino, significa abandonar el otro. Si pretendes recorrer todos los caminos posibles, acabarás no recorriendo ninguno".