Opinión
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  • Diario del Altoaragón

Prepararse para todos los escenarios

Habida cuenta los precedentes, podría considerarse un alarde de realismo el que pronunciaba en la entrevista que publicábamos ayer Arturo Aliaga, vicepresidente del Gobierno de Aragón, cuando reconocía que, en una economía globalizada, un constipado europeo puede provocar un serio problema a España y a nuestra comunidad autónoma. No en vano, prácticamente seis de cada diez euros de nuestras exportaciones tienen como destino los mercados continentales, lo que significa que para nosotros es fundamental que no haya un empeoramiento en el consumo o en el comportamiento de las empresas que adquieren los productos o los servicios a las altoaragonesas. En todo caso, tal y como señalaba Aliaga, la diversificación creciente de la actividad regional puede contribuir a padecer en menos profundidad cualquier revés que aquellos territorios que tienen puestos todos los huevos en la misma cesta.

Independientemente de que la posición relativa aragonesa pueda resultar menos inquietante que la del conjunto de España y así lo acredita el crecimiento superior en los últimos años, es cierto que los últimos indicadores oficiales abundan en que se elevan los síntomas de que podemos encontrarnos ante un cambio de escenario que sería más preocupante si determinados actores internacionales se meten en guerras comerciales o trabas de cualquier orden. Y además nuestro país tiene un hándicap severo con la deuda, donde ostentamos el triste honor de estar en el pelotón de cabeza en términos absolutos y liderando indiscutiblemente en los relativos, lo que implica que, si no queremos dejar un lastre severo a las próximas generaciones, habremos de dar con la tecla de la optimización entre el gasto y los ingresos con una organización rigurosa de los recursos.