Opinión
Por
  • LUIS DEL VAL

Pagan los pobres

Pagan los pobres
Pagan los pobres

Los pobres ya han pagado la reconversión del carbón, y basta pasar por determinadas zonas de Asturias y Teruel para darse cuenta de la conversión que han sufrido esas localidades gracias a la re-conversión. A finales del próximo diciembre o enero, los más desfavorecidos económicamente van a comprobar que el recibo de la luz, no sólo baja, sino que sube, y no sólo porque haya más consumo en invierno, sino porque las ayudas a las empresas de energías limpias, con objeto que les sean rentables sus instalaciones eólicas y de placas solares, las pagamos a escote entre todos los españoles. A los más ricos esta subida ni la notarán, a los más pobres les va a resultar bastante más sensible.

A los más ricos, a los que cambian a menudo de automóvil, no les pillan las restricciones de algunas ciudades como Madrid que, a partir de dentro de tres semanas, prohibirán la circulación de vehículos con una antigüedad superior a diez o más años, pero el modesto fontanero autónomo, que sigue trasladándose con su vieja furgoneta, desde hace más de dos lustros, le va a suponer comprar una furgoneta nueva o un nuevo automóvil en el que quepan los instrumentos de su trabajo cotidiano.

Cada vez que uno de nuestros gobernantes saca pecho, y presume de lo que va a limpiar la atmósfera, y de su decisión para respirar a pleno pulmón en cualquier lugar de la ciudad, es un brindis que le sale barato, porque lo pagamos entre todos. Los ricos, también, claro, pero los ricos son pocos y cuentan sus millones, mientras que los modestos se cuentan a millones, y son tantos, que logran pagarlo todo: el cierre de las minas de carbón, el reparto de dividendos entre los accionistas de las empresas energéticas, y la tranquilidad para las empresas automovilísticas que seguirán incrementando las ventas, gracias a nuestros ecologistas dirigentes. Además, reciclaremos lo que nos manden, aunque algunos dudamos de lo que se hace después. Gracias a los pobres viviremos tan ricamente.