Opinión
Por
  • MAR SÁNCHEZ RAMOS

Argentino

El bonaerense que ha resultado electo como presidente de la nación argentina hasta el 2023, tiene ante sí una situación muy difícil, tanto desde el punto de vista económico como social. Eso sí, desde la toma de su mandato ya ha demostrado no andarse con rodeos y, con sobriedad en la palabra y expresividad en los hechos, su primera acción ha sido la de convocar -sin distinciones- a sus compatriotas para que la nación comience a caminar, pasito a pasito, ya que está el país en auténtido estado de emergencia. Ciertamente, se hace muy difícil imaginar como esa tierra al otro lado del Atlántico, tan pródiga en riquezas naturales y con una ciudadanía de tan elevado nivel educativo y cultural, ha podido paulatinamente verse abocada a una virtual quiebra del estado. Y es que, indudablemente, para poderse quitar ese barril a punto de explosionar que supone la delicada situación actual y ¡ojo! revertirla -a la mayor brevedad posible- la unidad política nacional es la base para poder sostener cualquiera de las múltiples estrategias de éxito que hoy día son verdaderamente imprescindibles. Aviso a navegantes.