Opinión
Por
  • ÁLEX SÁNCHEZ BOLSA

La superstición

La superstición es definida por la RAE como la creencia que un determinado hecho influirá de alguna manera (buena o mala) sobre un segundo hecho, aunque no se haya demostrado que exista ninguna relación entre ellos.

Todo el mundo suele tener supersticiones que influyen en muchas de las decisiones cotidianas, porque se trata de un fenómeno universal cuyo origen proviene desde el fondo mismo de la historia y cada cultura tiene las propias.

Uno es más supersticioso cuanto más sienta amenazada su seguridad y calma ante la percepción de que algo malo puede sucederle e intenta asegurarse de lo contrario.

El abanico de supersticiones tanto de las de buena como las de mala suerte es muy amplio, surgiendo entre las primeras la del trébol de cuatro hojas, tocar madera y cruzar los dedos, mientras entre las segundas, pasar debajo de una escalera, derramar sal o romper un espejo.

Y, prueba de no ser supersticioso, es finalizar con 13 líneas y palabras.