Opinión
Por
  • JIMENA SÁNCHEZ CALDERÓN

La meditación

El ajetreado ritmo de vida de la sociedad que nos ha tocado vivir, nos impide mantener con mucha frecuencia un adecuado equilibrio entre una correcta alimentación, la práctica de actividades físicas o deportivas de forma continuada, y el estricto cumplimiento de los tiempos recomendados de descanso.

De tal manera que, cuando de tanto en cuanto se nos presentan épocas críticas -como la actual de la pandemia del corona virus- el saber hacerles frente y tomarse un tiempo libre sin tratar de cumplir con la infinidad de actividades diarias que, incluso, muchas veces se superponen, nos resulta harto beneficioso.

Así, aparte de ser responsables con todas y cada una de las normas que las autoridades sanitarias nos recomiendan, es importante encontrar espacios para la relajación -aunque sean tan solo unos breves minutos durante cada día- y, a ser posible, en nuestro propio hogar.

Y es que la meditación, aparte de ser una práctica enormemente saludable para cualquier persona, es al mismo tiempo una herramienta fundamental para alcanzar el sosiego y la tranquilidad, condiciones imprescindibles para si no todos, una gran parte de nuestras preocupaciones- cedan.