Opinión
Por
  • ARACELI CAVERO

El Coronavirus

Creo que hoy es indispensable hablar del COVID-19 a pesar de que muchos (como yo), estemos hasta la coronilla de tanto oír hablar de este bichito tan pequeño pero que tanto daño está haciendo.

Los informativos están prácticamente y casi exclusivamente con las noticias del coronavirus. Cualquier emisión de radio o televisión están sujetas a que se anuncie la oportuna rueda de prensa o comparecencia del Presidente, de uno o más ministros o de cualquier responsable de departamento.

No discuto que el asunto es grave, pero creo que deberían moderar las noticias, porque a veces son contradictorias y no facilitan la tranquilidad de muchas personas. Y no digamos las que se interpretan mal. Es el caso de una amiga muy querida que me llamó muy asustada y me dijo que "en Alemania se están llevando los muertos a camionadas". No se si a ustedes, pero a mi me vino a la mente las imágenes del Holocausto con los cuerpos de los judíos amontonados en fosas comunes.

También el Whathsapp está que hecha humo con comunicados, recomendaciones, noticias y bulos, vídeos con canciones y jotas, otros con oraciones y novenas; y todo para aliviar la reclusión y, en muchos casos, la inactividad a la que estamos sometidos. Y todo repetido tantas veces como grupos se tienen además de los particulares que se sienten obligados a compartirlo todo. Bienvenidos sean todos estos actos nacidos de la generosidad y la solidaridad de tantas y tantas personas buenas, que quieren aliviar los momentos difíciles por los que estamos pasando.

Otra cosa son los espabilados que quieren sacar tajada de la situación, como esa empresa que iba a subastar ¿al mejor postor mil mascarillas. Eso es enriquecerse con el dolor y la indefensión de otros. Seguro que casos como este son los menos.

Y no quiero terminar sin agradecer a todos los que están trabajando para hacernos la vida más fácil. No quiero nombrar a ninguno, pues seguro que me dejaría alguien y no quiero. Solo decir que nunca como ahora hemos valorado el trabajo de tantos profesionales.

Ojalá sirva esto para darnos cuenta de cuánto nos necesitamos unos a otros.