Opinión
Por
  • DAVID PASARIN-GEGUND

El Gobierno de los okupas

Les extraña a muchos que el Gobierno Psoe-Podemos facilite la vida de las personas que ocupan viviendas obligando a los propietarios a seguir pagando la luz o dificultando algo tan sencillo como la recuperación legal de su vivienda por parte del dueño legítimo. Tampoco es tan raro. Esa frase que suelen decir recurrentemente quienes toman posesión de sus cargos apelando a que "gobernaran para todos" suele ser mentira. La obligación de los partidos políticos debería ser responder a las inquietudes de aquellos grupos sociales que se identifican con sus siglas y que les han votado esperando, de ese modo, poner en el gobierno a personas que defiendan sus intereses. El problema es que llevamos tanto tiempo viendo como las élites defienden sus propios privilegios corporativos que nos extraña que Podemos haga aquello que le es propio: defender los intereses de aquellos ciudadanos que espera que le voten en el futuro. Lo raro no es que personas que pertenecen al movimiento okupa o antisistema voten al partido de Pablo Iglesias a la espera de que este defienda sus postulados cuando llegue al poder. Lo raro es que gente perteneciente a la menguada clase media, pequeños empresarios, autónomos o jubilados con pisos alquilados para complementar sus pensiones hayan votado a una organización que asesoró al régimen venezolano, elogia a Fidel Castro y lleva bajo la americana una camiseta del Che Guevara. Los okupas también tienen derecho a que los políticos que les representan tomen medidas a su favor de vez en cuando. Los que tendríamos que reflexionar somos nosotros sobre si los partidos en los que confiamos defienden realmente nuestros intereses o anteponen los suyos propios.