Opinión
Por
  • JUAN JOSÉ MAIRAL HERREROS

¿Falta de previsión o dejadez?

Ojalá me equivoque. Ojalá, como tantas veces pasa en esto de la educación, la situación esté controlada o al menos consensuada por la comunidad educativa y las familias antes del mes de septiembre. ¡Que tiempo ha habido! Con esto de la covid-19 allá por marzo, nuestras aulas se quedaron vacías de vida escolar y a día de hoy nuestras aulas no se sabe cómo van a ser. Primero están los problemas de espacio en una gran mayoría de colegios y cómo resolverlo, luego la falta de profesorado para dividir clases y grupos y sin contar con los medios de sanidad y seguridad necesarios o la cuestión de dónde dar la comida a los alumnos de comedor, por no hablar del tema del transporte escolar y su funcionamiento, además de la supresión de las actividades extraescolares fundamentales o necesarias para muchas familias por el tema de la conciliación laboral y familiar. Y por no hablar de la tan llevada educación presencial, on-line o mixta y de la equipación de tablets y pizarras digitales para los centros y para todos los alumnos.

Tiempo ha habido desde hace meses para estudiar y proponer medidas, pero mucho me temo y ojalá me equivoque como digo, que nos encontraremos a la vuelta al cole con esas situaciones que en nuestro país se van dejando y dejando y luego vienen las prisas. Y esta vez la cosa no es broma.

Qué ganas de tener ese protocolo para todos que se dice van a tener los centro escolares, qué ganas tendrán los padres de dejar a sus hijos en las aulas, pero seguros y confiados, qué miedo me da que llegue septiembre, que está a la vuelta de la esquina, y cada cual vaya por su lado y cada cual se solucione sus problemas ellos mismos como casi siempre. Y es que cada colegio es un mundo diferente, unas circunstancias diferentes y la realidad, a veces, no se corresponde con la realidad y las ideas y los tiempos de los políticos de este país.

JUAN JOSÉ MAIRAL HERREROS

Sabiñánigo