Opinión
Por
  • GERARDO HERNÁNDEZ

Sobre la acción política

Lo último que sabemos -que no sabemos, perdón- del "Covid" es de las medidas tomadas para reforzar la Sanidad. De lo otro, de medidas de carácter militar, cuartelario, con reclusión-arresto de sanos y sus graves implicaciones, de eso sí, y a todas horas nos lo cuentan.

Se están sirviendo de pruebas más que dudosas, que designan como "de contagio", cuando no lo son, y resultan además asintomáticas en cerca del 90% de los casos; que en convivientes estrechos, por ejemplo, es frecuente ver que unos resultan positivos y otros no. Pruebas que sirven para cerrar negocios, hacer cuarentenas, confinamientos reiterados, "toques de queda" como en situaciones bélicas, etc, etc....

Y no es esto cuestión local, ni nacional siquiera, es cosa mundial. Organizada desde vete a saber qué instancias, como la dubitativa OMS, subvencionada mayoritariamente por grandes capitalistas y sus intereses financieros, entre los que están, ¿cómo no las empresas farmaceúticas y sus nuevas vacunas.

Lo que realmente se pretende -y no se ve, u obvia de forma cómplice- es la extensión global del miedo, que no se corresponde con la auténtica gravedad sanitaria. En realidad, a nada que escarbemos un poco, es la disculpa para implantar esta "nueva normalidad" (N.O.M), anunciada desde el minuto uno por los presidentes de todos los Estados del mundo, al unísono.

Destrucción del equilibrio anterior de un plumazo, pero no para organizarnos desde otras coordenadas, desde la colaboración y solidaridad, sino sólo para obedecer los designios de las élites, que son las que mueven los hilos en esta historia en la que nos hemos vuelto ciegos, o idiotas perdidos.

Pero sigan, sigan... no vaya a ser que les señalen.