Opinión
Por
  • Diario del AltoAragón

El virus sigue entre nosotros

Residencia Parque San Julián de Grañén.
Residencia Parque San Julián de Grañén.
S.E.

Diecisiete residencias de la provincia de Huesca tienen un brote abierto y en el conjunto de Aragón, 58. En los centros de mayores, basta con un solo positivo para que se considere brote y en 36 de los 58 centros se da esta circunstancia. Pero en otros no, y varios usuarios de residencias del Alto Aragón han fallecido. Es cierto que frente a la virulencia existe el escudo de la vacuna, que aminora los efectos, pero no es infalible y no a todos les vale. En general, y no solo en los centros de mayores, cinco altoaragoneses han fallecido en los últimos siete días.

El virus sigue entre nosotros y, aunque parezca obvio, hay que recordarlo. Para que no se olvide en estos días de vacaciones, de relajación y de reencuentros con familia y amigos, días en los que para los oscenses y vecinos de muchísimas localidades de la provincia solo mentar una fecha invita a la fiesta.

Con todo, la campaña de vacunación entre los adolescentes avanza a buen ritmo para evitar la propagación del virus. A los jóvenes se atribuye el inicio de esta sexta ola con una alta incidencia y están acudiendo a vacunarse con prontitud. Esta es, sin duda, una de las mayores garantías para que siga bajando la incidencia acumulada.

Pero no puede bajarse la guardia. En centros afectados se han limitado de nuevo las visitas y quizá habría que repensar las medidas, pero una vez más el equilibrio entre la seguridad y el aislamiento de personas mayores que necesitan afecto es complicado. Contar con personal y desinfección suficiente son otras de las garantías cuyo cumplimiento se debe controlar, porque el virus se sigue colando por la puerta de los centros de mayores.

Como con los accidentes de tráfico, tenemos que aspirar como sociedad a cero muertes.