Catarsis sin fiesta

9 DE AGOSTO de 2021. Año cero, segunda parte. Doce del mediodía, sin chupinazo, sin blanco y verde, sin catarsis colectiva en la plaza de la catedral de Huesca. Pero con responsabilidad, con compañerismo y con empatía con los oscenses que luchan contra la covid desde la cama del hospital San Jorge o a su lado dando la mano o los cuidados sanitarios necesarios.

Las principales plazas las encontrarán valladas, como la de la catedral o la de Navarra. Los agentes de las fuerzas de seguridad están en la calle, no para sancionar, sino para dar seguridad a los ciudadanos y controlar la expansión del virus. Y esa imagen de vacío será la mejor para este año 2021, que más que cero, tiene que ser el último sin fiesta.

Que los almuerzos no sean solo de huevos, con longaniza y patatas fritas, que tengan distancias y mascarillas. Que la fiesta no exista y el sentimiento laurentino renazca en nuestro interior. Que de 1.00 a 6.00 de la mañana no quede nadie en la calle. Que Huesca dé la mejor imagen de nosotros mismos. Que el grupo de amigos o la familia no se convierta en un foco de contagios y este día una fecha para olvidar.

Y volveremos a ver las plazas llenas y la ciudad vestida de blanco y verde, y la fiesta llenará nuestro espíritu y nuestros corazones; y podremos dejarnos llevar por la música y descargar la emoción contenida en este tiempo de pandemia. Todo llegará.

Pero, hoy, la fiesta no es posible. Participemos con nuestras acciones de esa unión social por un bien común, también una verdadera catarsis. No hay que hacer nada, solo cumplir las normas. Hoy no puede haber fiesta mejor. La de blanco y verde llegará. Hagamos estos días todo lo posible por que sea el 9 de agosto de 2022, el año 1 de una nueva era. ¡Viva Huesca! ¡Viva San Lorenzo!