Vuelta a El Alcoraz

Vuelve el fútbol, empieza la Liga y el público regresa a los estadios: a El Alcoraz. La SD Huesca recibe hoy al Eibar en el primer encuentro de Primera y Segunda de la vuelta del fútbol profesional. Casi un año y medio después del último partido con afición, el Huesca de Ambriz inicia la temporada en segunda con un duelo con otro equipo recién descendido.

Podría haber sido en Primera, pero no fue. La afición ya se perdió el ascenso y después toda la temporada. Ahora, su calor tiene que ayudar a empezar sumando los tres puntos.

No estarán todos, por las limitaciones de aforo, fijadas en un 40 por ciento para los estadios, por estar al aire libre. Entrarán 3.600 aplausos y 3.600 ovaciones multiplicadas por las veces que lo merezcan. Pero más que un número, entrará un sentimiento.

Estos primeros encuentros servirán para comprobar si son lugares seguros, para ver si los accesos y las salidas, así como las dinámicas en los interiores de los estadios pueden permitir ampliar esos aforos.

Con todo, el temor no está en la aplicación de estos protocolos, sino en el antes y el después del partido. En esas ‘fiestas’ que propicia el fútbol, que muchas veces van más allá de los 90 minutos en el estadio. De nuevo, esa llamada a la responsabilidad, pero también esa invitación al goce de volver a vivir un partido en esa comunión de la afición que consigue ensalzar el espíritu deportivo.

Hoy, los 3.600 primeros aficionados en compartir el estreno liguero van a vivir un momento histórico y lleno de emoción. Ese sentir blanco y verde de estos días en el corazón de los oscenses, se mezcla con el azulgrana del Huesca. ¡Ojalá acabe la temporada con un Alcoraz lleno! ¡Ojalá sea para vivir de nuevo el ascenso a Primera! ¡Viva el Huesca!