Opinión
Por
  • Matilde Campo

Badaguas, una gestión urbanística ambigua y mal organizada

El núcleo de Badaguas.
El núcleo de Badaguas.
S.E.

La gestión de la modificación del PGOU para el núcleo de Badaguas ha generado dudas en el grupo municipal de Ciudadanos y preocupación por la incertidumbre que va a generar. Hay medidas dadas por este Consistorio que reconocemos justas y necesarias; y se asumieron con responsabilidad. Sin embargo, hay otras medidas que tienen un calado político e intencionalidad ideológica, donde extrañamente se cercenan los límites competenciales autonómicos, trasladándose a una entidad local.

Decisiones que ponen en alto riesgo la supervivencia laboral de varias empresas, algunas ya arruinadas, y que tiene una cruel incidencia en las familias y en tantas personas, aunque parece que esto no les importa al resto de grupos políticos que se han dejado convencer por el discurso del Grupo Socialista, que es especialista en dar licencias, al menos incompletas, como por ejemplo, en el polígono industrial de Rescanato y luego es incapaz de solucionar la falta de servicios.

Nosotros, como grupo político, tratamos de caminar con responsabilidad ciudadana, con prudencia, pero también con un punto de vista crítico. Hoy por hoy, las entidades supramunicipales no consideran subsanados los errores de una licencia que se dio de manera precipitada o, como mínimo, imprudente. Ahora el resto de grupos, pretenden controlar el futuro a través de la reinterpretación y la ocultación de los errores del pasado utilizando el juego del baile competencial.

Esta confusión y las infracciones administrativas (cuya graduación intenta rebajarse de manera arbitraria) cometidas por la venta de inmuebles que no debieron hacerse, nos obligan a reinventarnos con las medidas de modificación del PGOU municipal. Mientras, el resto de grupos políticos apoyan este esperpento del equipo de gobierno parapetan, tras las fronteras invisibles de la confusión competencial, el desgobierno de la ciudadanía, y la normalización de un procedimiento administrativo que desde el principio no ha sido normal, porque ha desembocado en la ruina de empresas y en infracciones administrativas graves.

Ese marco legal de concesión de licencias de hacer concesiones, tiene validez siempre y cuando sea razonable en aras del interés público, pero no cuando se está encubriendo una gestión urbanística ambigua y mal organizada. Pedimos que el Ayuntamiento no se arrogue la omnisciencia de reescribir constantemente el pasado en función de las necesidades políticas del presente, que no es lo mismo que las necesidades del interés social del presente. En resumen, controlar el futuro a través de la reinterpretación del pasado se traduce en que las empresas darán al Ayuntamiento 284.000 euros sin saber en qué se lo van a gastar y en cuatro viviendas, que dicen: se destinarán a vivienda social.

El grupo Ciudadanos no apoyará la subsanación de una distopía que solo generaría una nueva incertidumbre, al dejar de nuevo el proyecto del cambio del PGOU en una condición suspensiva que fluye hacia la decisión del Gobierno de Aragón, en cualquier caso; por lo que al final del día es lo mismo. Ciudadanos defiende siempre, y no hará ahora una excepción, el interés general que comprenderá todas aquellas actuaciones necesarias para garantizar la eficiencia, estabilidad y transparencia del mercado inmobiliario. Por todo ello solo podemos rechazarlo en su totalidad.  

Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Jaca