Empieza la temporada de esquí

LAS ESTACIONES de esquí de Astún, Candanchú y Formigal-Panticosa recibieron ayer en sus pistas a los primeros usuarios de la temporada en una jornada típicamente invernal, que alentaba esa ilusión que todo aficionado siente cuando vuelve a calzarse los esquís. Además, se espera que Cerler abra en los próximos días.

El frío, deseado incluso en un otoño atípico, hizo sacar de los armarios gorros, guantes y bufandas en gran parte de la provincia, mientras caían los primeros copos de nieve, aunque no llegaron a cuajar, en localidades como Sabiñánigo. Llega la nieve en el deseado puente (o semana completa) de la Constitución, para disfrutarla en el monte o desde el interior de cualquier casa mientras se adorna el árbol de Navidad o se coloca el belén en la cuenta atrás para las fiestas. Ayer, sin duda, supo a primer día y, quizá, a que pueda ser la señal de una buena campaña.

El esquí supone una parte importante de la economía de la provincia, especialmente de las comarcas con estaciones -Jacetania, Alto Gállego y Ribagorza-, todas las pirenaicas excepto Sobrarbe. Así se puso de manifiesto sobre todo durante la pandemia, porque si falla uno de los motores principales del turismo en esta época, el efecto se deja sentir en absolutamente todos los sectores, como hostelería, comercio, inmobiliario y servicios de todo tipo.

Por ello, es importante avanzar en la unión de las estaciones y en la mejora de los servicios para que sigan siendo atractivas con respecto a otras comunidades o países del entorno. Por el momento, toca disfrutar de este puente festivo en el que recibimos en la provincia a cientos de visitantes a los que hay que fidelizar con la nieve y con la atención al cliente.