Edificios públicos eficientes
La eficiencia energética marca la hoja de ruta de las políticas europeas y, como consecuencia, la sostenibilidad se imprime en todos los proyectos de cualquier administración que aspire a conseguir fondos europeos. Invertir en ahorro energético, supone un abaratamiento de la factura pero, especialmente, un uso responsable y respetuoso con el medio ambiente. Huesca apuesta por destinar 1,7 millones en mejorar la eficiencia energética del Palacio de Deportes, para el que ha recibido 1,3 millones de Europa. De este modo, se ahorrará un 65 %.
Estos datos hablan solos de la ineficiencia de la instalación actual, por un lado, porque el ahorro que se conseguirá será muy alto y, por otro, porque evidentemente cuando merece la pena invertir 1,7 millones de euros, estará calculada la amortización. No obstante, al margen del ahorro económico la principal motivación tiene que ser la sostenibilidad. Una de las medidas será la colocación de placas solares. Se trata de un edificio singular desde el punto de vista arquitectónico y que quedó en la memoria colectiva por el hundimiento de la cubierta cuando ya se estaba finalizando el edificio en 1993 y fue necesario cambiar la tipología.
En general, en una provincia como Huesca, en la que se vende naturaleza, la sostenibilidad tiene que ser una característica que distinga de otros territorios. No debe ser la excusa para conseguir fondos sino que estos permitan acometer actuaciones a las instituciones, que no podrían siquiera planteárselas con fondos propios. El ahorro energético se ha convertido en una manera de entender la gestión pública y la vida por parte de los ciudadanos.
