Subida salarial
LA REIVINDICACIÓN de los sindicatos en el Primero de Mayo se centró en la petición de aumentos salariales para hacer frente a la inflación. En Huesca, no se veían concentraciones tan masivas: por un lado UGT y CCOO que reunieron a unas 300 personas y, por otro, el bloque crítico formado por CGT y CNT con más de 150, desde hacía casi una década. En estos momentos, la pérdida de poder adquisitivo es una de las grandes preocupaciones, sobre todo, porque afecta a todos los trabajadores. Con todo, ayer hubo colectivos especialmente representados porque se encuentran en medio de conflictos laborales y fueron ellos los que protagonizaron la lectura de los manifiestos de los sindicatos mayoritarios.
Las trabajadoras del sector de la limpieza, los del Ayuntamiento de Huesca, los del transporte sanitario, los administrativos de Justicia y las organizaciones de la Iglesia por un Trabajo Decente formularon sus reclamaciones. Algunos ya han tenido jornadas de huelga y las negociaciones están atascadas, otros se encuentran en ellas... y, en general, toda la sociedad envuelta en las promesas electorales de los partidos en vísperas de las elecciones municipales y autonómicas del 28-M.
En esta situación, los gobiernos tienen que trabajar para combatir la inflación así como adoptar medidas para garantizar un mercado laboral eficiente. Mientras tanto, en el ámbito laboral todos los agentes sociales -patronal y sindicatos- han de ser responsables y consecuentes con la situación para ser capaces de llegar a acuerdos con los que se garanticen unas condiciones laborales dignas, una economía estable y, sobre todo, la paz social.
