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  • Diario del AltoAragón

El cierre del Jai-Alai

Imagen de archivo de la sede de la peña Alegría Laurentina, el Jai Alai
Imagen de archivo de la sede de la peña Alegría Laurentina, el Jai Alai
D. A.

LA ALCALDESA de Huesca, Lorena Orduna, ha firmado un decreto impopular pero inexcusable: el cierre del salón Jai-Alai por tener la licencia caducada desde hace cinco años. Después de los 13 fallecidos en los recientes incendios de las discotecas de la zona de ocio de Atalayas, en Murcia, es normal que el Ayuntamiento de Huesca (y cualquier otro) compruebe los expedientes para cerciorarse de que todo está en orden y de que se cumple la normativa.

La mítica sala de la Peña Alegría Laurentina donde se han podido ver multitudinarios conciertos durante las noches de San Lorenzo, pero también el resto del año, pasó ya a la historia hace unos años al tener que conformarse con actos de menor formato por falta de salida de emergencia. Ante la imposibilidad de hallarla, se apostó por otro tipo de programación, que ahora queda en suspenso de nuevo. Horas antes de la actuación prevista para anoche de Mack McDonald, la peña anunció que se trasladaba al bar Juanse por esta circunstancia.

Ahora, Ayuntamiento de Huesca y Peña Alegría Laurentina trabajan en coordinación para poder reabrir la sala de la que tantos buenos recuerdos atesoran los oscenses. Aunque estos cierres siempre han supuesto un varapalo para la población oscense, después de los desgraciados y recientes acontecimientos que conmovieron a todo el país, debe someterse a un estudio técnico para que cuando reabra sea con todas las garantías técnicas para que las noches de fiesta se disfruten con tranquilidad y seguridad. Aunque la caducidad de la licencia no significa que el salón sea peligroso, simplemente hay que asegurarse de que cumple la normativa.