Proyección internacional

CADA AÑO la capital oscense se une un poco más al séptimo arte, donde se ha hecho un hueco irremplazable a través de un trabajo coherente y mantenido en las 52 ediciones que va a cumplir el Festival Internacional de Cine de Huesca. Con el cortometraje, como seña de identidad, la cita ha explorado y ha acercado al Alto Aragón nuevas propuestas, directores y actores. Para algunos ha servido de trampolín mientras que otros han llegado para recoger su máximo galardón. El Premio Luis Buñuel de esta próxima cita será para Victoria Abril, una actriz con una fuerza bárbara y una versatilidad con la que ha cautivado a públicos de todos los tiempos y latitudes.

Precisamente, ese guiño a Francia, país de honor en esta próxima edición, entronca a la perfección con el reconocimiento a esta artista, que debutó con 14 años en ‘Obsesión’, de Francisco Lara Polop, y a partir de allí apareció en títulos como ‘Robin y Marian’, de Richard Lester, protagonizada por Sean Connery y Audrey Hepburn. Pero si algo le dio popularidad fue su aparición en la segunda mitad de los años 70 en el concurso ‘Un, dos, tres... responda otra vez’, de Narciso Ibáñez Serrador. En este tiempo, a las órdenes de Vicente Aranda realizó algunos de sus títulos más destacados como ‘Tiempo de silencio’ o ‘El Lute: camina o revienta’ y, a partir de ahí, despegó su carrera internacional que ahora la hace merecedora del Premio Luis Buñuel al que, al mismo tiempo, Victoria Abril prestigia. El Festival Internacional de Cine volverá a proyectar el nombre de la ciudad al mundo a través de un programa atractivo, de sus premios -este año con Victoria Abril- y de su conexión con los principales festivales del mundo.