Sociedad

ROMERÍA ECUESTRE

Una romería ecuestre une Graus y Torreciudad

La primera edición de esta ruta a caballo reunió ayer a una veintena de equinos en un día soleado y con ambiente festivo

Una romería ecuestre une Graus y Torreciudad
Una romería ecuestre une Graus y Torreciudad
E.F.

GRAUS.- La I Romería-Ruta Ecuestre entre Graus y Torreciudad resultó todo un éxito y discurrió en medio de un espléndido ambiente en un día soleado y con temperaturas agradables que permitiódisfrutar del magnífico entorno, adornado por la exuberancia primaveral. La bendición de la veintena de caballos participantes al llegar al santuario mariano marcó el momento más emotivo de una romería que arrancó con la bienvenida en la plaza Mayor de Graus por parte del alcalde, José Antonio Lagüens, y el director de Desarrollo de Torreciudad, Antonio Quintana. Como organizadores, ambos enmarcaron esta acción en el proyecto más amplio de colaboración entre el santuario y su entorno que, en este caso, supone apostar por el turismo ecuestre en la zona.

Lagüens agradeció la participación en esta primera edición y se mostró convencido de la continuidad de esta cita organizada conjuntamente entre el Ayuntamiento y el Santuario en el marco de un proyecto más amplio de colaboración. "Sabemos que venís de muchos sitios -apuntó el alcalde grausino refiriéndose a la procedencia de los jinetes: Capella, Castejón del Puente, Fonz, Graus, Huesca, La Puebla de Castro, Monzón, San Esteban de Litera y Sesué; así como de Zaragoza y Almacellas- y estamos encantados de recibiros e iniciar este periplo de romerías porque esto no se queda aquí. Seguiremos con ellas porque queremos continuar estrechando los lazos con Torreciudad. Esta romería, con otras, es una de estas acciones conjuntas y queremos mantenerlas en el tiempo". Con los caballos situados en el perímetro de la plaza, les deseó que disfrutaran del día. "Que tengáis una magnífica jornada y muchísimas gracias por haber participado y por estar en Graus", concluyó el edil.

Antonio Quintana también contextualizó la romería en el marco de colaboración mutua con Graus. "Es fruto de una relación estrecha entre el Ayuntamiento de Graus y el Santuario de Torreciudad que tiene entre sus fines desarrollar todas las comarcas colindantes y sobre todo Ribagorza, que es donde se encuentra, pero sin excluir al resto". Recordó que en concreto, con Graus, esta es una de las primeras acciones en las que se implican todos los agentes locales para hacer realidad algo que pueda servir también para el desarrollo de todas las comarcas. Un punto de partida de un turismo ecuestre, tal vez poco conocido, pero que tiene unas posibilidades tremendas. Esto es una acción más que enlaza con la feria caballar que el Ayuntamiento de Graus organiza con motivo de la Feria de San Miguel", comentó.

En un día luminoso pero con una ligera brisa que suavizó las temperaturas, la marcha partió desde Graus, donde se recorrió el casco urbano, la plaza y la parte antigua, hasta el carril bici. A la altura del cementerio, se cogió ya la pista que condujo a los romeros hasta la carretera Graus-Secastilla, donde se recorrieron unos 600 metros de la HU-V- 6432 hasta la Tejería.

Tras un avituallamiento en ese punto, se tomó otra pista hasta Torreciudad completando un trazado de 12 kilómetros en unas tres horas. "Es un paisaje idílico. Yo -recordó Quintana- que he hecho muchas romerías por muchas partes del mundo, os aseguro que todo esto hay que explotarlo y promocionarlo. Vosotros estáis, no sé si os dais cuenta, haciendo historia ahora mismo".

Una vez en Torreciudad, la veintena de caballos participantes dispusieron de un área de césped con boxes, cedidos por el Ayuntamiento de Graus; así como agua, paja y alfalfa; y sus dueños con parquin adecuado. Y tras refrescarse, los jinetes, con pie en tierra para no dañar el firme de la plaza, se acercaron con sus caballos hasta la escalinata del santuario donde el rector Pedro Diez-Antoñánzas bendijo los animales. Como colofón, jinetes y acompañantes fueron obsequiados con una paella en las la zona.

La actividad contó con la colaboración de Bodegas Obergo, Carnicería Garúz, Club Ciclista de Graus, Frutería Garanto y Guardia Civil.