Sociedad

AIRE LIBRE

La belleza de Lacuniacha y de la nieve se funden con los animales

El Parque Faunístico de Piedrafita de Jaca espera cerrar el año con el paso de unos 57.000 visitantes

La belleza de Lacuniacha y de la nieve se funden con los animales
La belleza de Lacuniacha y de la nieve se funden con los animales
R.A.

Lacuniacha es un "Bioparque" de 30 hectáreas donde encontramos una representación tanto de flora como de fauna de las especies que viven o vivieron en algún momento en el Pirineo. Se encuentra en un bosque natural, a menos de dos kilómetros de la localidad de Piedrafita, municipio de Biescas, al que se accede desde la carretera A-136. En la visita al parque, podemos ver en semilibertad linces, corzos, lobos, bisontes, renos, gamos, zorros, jabalíes, osos, sarrios, caballos, etcétera. Además, se puede apreciar la flora, aprendiendo a distinguir entre pinares, hayedos, abedules o acebos, otros ejemplares arbóreos, y contemplar el bosque mixto del Pirineo y la inmensidad de los picos que circundan el parque. Hay colocadas mesas de interpretación y áreas de descanso y bancos en los que sentarse un rato y contemplar desde lo alto, paisajes tan impresionantes como las aguas del pantano de Búbal o cómo se alza majestuosa peña Telera o la sierra de la Partacua.

Los animales que viven aquí, han nacido en cautividad, provienen de centros de recuperación, o han sido rescatados de lugares donde no recibían los cuidados necesarios para su bienestar.

El recorrido es de unos cuatro kilómetros y medio por sendero de montaña donde al paso, nos encontraremos con alrededor de 140 animales, de las 15 especies diferentes que viven en este espacio.

Este parque forma parte de la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala, única en territorio aragonés.

En cada época del año, el parque de Lacuniacha nos sorprenderá y nos mostrará cosas diferentes que nos invitarán a volver. Y el invierno es una de esas épocas en las que descubriremos un espacio cubierto de nieve donde los animales campan a sus anchas en un paisaje natural.

La directora del parque, Raquel Betanzos, explica que en esta época invernal se cambian las dietas de los animales "porque en la primavera o el verano, la propia naturaleza les proporciona parte de la comida que ahora no tienen. Por ejemplo, en el caso de los osos les tenemos que preparar para la hibernación. De momento siguen despiertos pero les alimentamos para que tengan suficientes calorías para afrontar varios meses de hibernación".

Ahora la dieta de los osos "lleva cacahuetes, que son muy energéticos, el resto del año no los comen".

Los carnívoros, como los lobos, tienen la misma dieta todo el año "porque la naturaleza no les provee a ellos. Sobre todo cambia en el caso de los herbívoros que necesitan más hierba. Por ejemplo, en verano los bisontes en su pradera están pastando y ahora la tienen cubierta de nieve y tenemos que procurar que tengan más cantidad de hierba".

En cuanto a visitantes la temporada de primavera y verano son las de mayor afluencia, "y ahora cada vez más el otoño, pero el invierno para nosotros es temporada baja a pesar de que el parque está muy bonito y nuestros animales están muy bien aclimatados. Quizás para ellos el invierno es una de las mejores épocas".

Explica Raquel Betanzos que este 2019 ha sido muy bueno y acabarán el año contabilizando alrededor de 57.000 visitantes. "El tiempo nos ha influido un poco pero acabaremos el año mejor que el 2018, que ya fue bueno. Siempre digo que Lacuniacha hace un poco de barómetro. Cuando hay gente en la provincia, en Lacuniacha lo sentimos porque vienen a vernos. El verano ha sido muy bueno turísticamente".

Y en invierno, Lacuniacha es una oferta de ocio complementaria al esquí "porque al final quienes visitan la zona pueden hacer más cosas que esquiar".

Para un futuro, el parque tiene proyectos de ampliación "y barajamos varias líneas de trabajo como mejorar la experiencia de la visita que en este año los domingos de mayo y junio ha sido guiada. Normalmente la visita guiada solo era para grupos que ya venían conformados, y ha funcionado bien".

El reto para este parque que abre todos los días del año, con diez personas en plantilla que se refuerza en verano, "es tratar de desestacionalizar para que al final no se nos concentre todo en agosto, y ahí vamos poco a poco".