Sordo asegura que hay tiempo para revertir las reformas del PP aun sin PGE

ZARAGOZA.- El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha defendido en Zaragoza que aunque el Gobierno no consiga aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE), y en el caso de que las elecciones se aplacen hasta el próximo otoño, es posible echar atrás las leyes sobre la reforma laboral, de desempleo y las pensiones que aprobó en el Partido Popular.

No obstante, ha reconocido que sin PGE al Gobierno le queda "poco oxígeno" antes de convocar elecciones, pero aunque no los haya, es necesario "dotar" a la legislatura del tiempo suficiente para acometer reformas en materia laboral, de desempleo y de pensiones y es posible que se introduzcan "una serie de correcciones".

"Es tiempo de hechos y menos de palabras", ha reivindicado el líder sindical, a la vez que no se ha mostrado optimista en que los PGE finalmente se aprueben.

Desde el sindicato consideran que los PGE deben ser aprobados porque "son más expansivos que los de los últimos años", aunque les generan algunas dudas por "insuficientes" en cuestiones como las fiscales.

"Es una profunda irresponsabilidad la posición de algunos grupos políticos aparentemente antagónicos pero que objetivamente se están haciendo el juego en este momento. La posición del PP y Cs está favoreciendo la estrategia política del independentismo que quiere volver a la confrontación del 'procés' y la posición de PdeCat y Esquerra Republicana, si presentan la enmienda a la totalidad, está favoreciendo la estrategia de PP, Cs y Vox por terminar con esta legislatura y buscar un escenario por unas políticas que apuntan a reaccionarias, donde alguien debería poner un poco de sentido común", ha analizado.

Unai Sordo visita estos días Aragón para participar en asambleas en las tres provincias, este miércoles en Teruel, y el jueves en Huesca y la capital aragonesa, y para conocer diferentes centros de trabajo, como el Hospital Universitario Miguel Servet.

Sobre la valoración que hace el sindicato del momento social en el que se encuentra el país desde que accedió al Gobierno Pedro Sánchez tras la moción de censura a Mariano Rajoy, Sordo ha apuntado que se está "aparentemente en un punto de inflexión" que tiene que ver con la negociación de los Presupuestos Generales del Estado y su convalidación, y el debate político se ha modificado de una manera "radical".

Por eso, ha lamentado que se haya pasado de un "debate importante" sobre la precariedad laboral y la desigualdad (como cuando se acordó una subida de los salarios con la CEOE de un 3 por ciento y un salario mínimo de 14.000 euros) a una "polarización extrema" de la sociedad española, con elementos territoriales y de fragmentación.

"Esto preocupa mucho a CCOO y más allá de los discursos que quieren instalar PP, Ciudadanos y la irrupción de Vox, a las fuerzas progresistas le pedimos que recuperen el pulso de una agenda social en el país", ha reclamado.

También ha comentado que desde el sindicato llevan "tiempo trabajando" en medidas que corrijan en profundidad las reformas laborales, de empleo y de pensiones que durante la crisis han "empobrecido" a una parte muy importante de los españoles, así como las fiscales que han provocado que se hayan detraído del sector público "muchos recursos".

Por ello, demanda la recuperación de la agenda social frente a la de "confrontación y polarización" que está promoviendo la derecha y que desde el sindicato consideran que es "prioritaria para la salud democrática y social del país".

También ha defendido la vuelta a la prevalencia de los acuerdos sectoriales por encima de los empresariales, porque "no puede ser" que la CEOE suscriba un acuerdo sobre subidas de salarios y el salario mínimo y después haya "muchísimas resistencias empresariales".

Sobre las subidas de salarios ha asegurado que están dispuestos "a tensionar las negociaciones colectivas", a la vez que ha lamentado el "sesgo enorme de género y edad" que tienen los emolumentos más bajos.

También ha dejado claro que España debe hacer "un replanteamiento" acerca de cómo llevar a cabo políticas de cohesión territorial y de impulso a la producción, que no pueden hacerse "exclusivamente" a través del capital privado, en referencia al problema de la despoblación que incrementarán los cierres de las centrales térmicas y las minas en Aragón, Asturias y León.

En este sentido, ha defendido que debe producirse una interacción entre el sector privado y el público con políticas "potentes" de infraestructuras, con una planificación compartida y donde se necesita la inversión con una "visión correctora de los desequilibrios que existen en España".

"Si dejamos al mercado hacer solo, el mercado despuebla, porque los nichos que no le son rentables no los trabaja".