Aragón

ALTO ARAGÓN - RECURSOS HIDROELÉCTRICOS

La central eléctrica de Lafortunada, la más grande del Pirineo, se paraliza tras 87 años

El salto del Cinqueta ha dejado de producir, aunque se sigue turbinando el agua del río Cinca

La central eléctrica de Lafortunada, la más grande del Pirineo, se paraliza tras 87 años
La central eléctrica de Lafortunada, la más grande del Pirineo, se paraliza tras 87 años
S.E.

HUESCA.- La banda sonora de Lafortunada sigue sonando, pero engaña. Ese ronroneo sordo que han escuchado sus vecinos toda la vida no se ha acallado por completo, porque se sigue turbinando el agua del Cinca. Pero en ese edificio, compartido por dos centrales porque confluyen dos sistemas, se ha detenido la producción de energía del salto del Cinqueta, que ha revertido al Estado 87 años después de la concesión.

La suma de las centrales Lafortunada-Cinca (41,4 MW) y Lafortunada-Cinqueta (40,8), que comparten espacio, la convirtieron en la más grande del Pirineo aragonés. Ahora, ha dejado de serlo y cada día que no se turbina se pierde dinero. Los municipios donde se encuentra calculan que su producción podría superar los 5 millones de euros. Ya que la tienen allí, quieren que produzca y quesus beneficios reviertan al territorio, también a modo de compensación histórica.

La construcción del aprovechamiento de caudales de la cabecera del Alto Cinca y su afluente, el Cinqueta, se planea en 1917, y las obras se desarrollan entre 1918 y 1934, con el objetivo de llevar la energía para abastecer Bilbao. Se crearon seis centrales: Urdiceto, Barrosa, Bielsa, Lafortunada-Cinca, Lafortunada-Cinqueta, Salinas y Laspuña; así como los embalse de Pineta y Plandescún.

En 1923, Sociedad Hidroeléctrica Ibérica puso en marcha el primer grupo de turbinas del Cinca, el que hoy sigue en marcha, y además la concesión se renovó hasta 2065. En 1932, entró en funcionamiento el segundo grupo alimentado con las aguas del Cinqueta. En realidad, la concesión a 75 años caducó en 2007 pero fue pasando el tiempo, incluso se caducó el primer expediente que hubo que iniciar de cero de nuevo y no fue hasta el 18 de diciembre de 2017 cuando el Ministerio resolvió el expediente de reversión al Estado. Con todo, Endesa ha tardado casi dos años en entregar las instalaciones por una reversión que llevó a los tribunales.

Casi todas las familias de esta zona de Sobrarbe pueden contar historias: como que mi bisabuelo falleció en un accidente en las obras; que mi abuelo trabajó allí cuando volvió de Francia tras la Bolsa de Bielsa; que la carretera a mi pueblo se hizo por la central; que mi padre se jubiló allí; que incluso yo viví en la presa de Plandescún; que pude estudiar en el instituto de Aínsa, donde había un internado, que se creó para los hijos de los trabajadores; o que trajo sueldos altos y estables a la zona. Por todo lo que significa, como territorio cedente de recursos, exigen compensaciones.

QUINTA CENTRAL REVERTIDA

Es la quinta central hidroeléctrica del Pirineo aragonés que revierte al Estado, después de El Pueyo de Jaca, la Auxiliar de Campo, Barrosa y Urdiceto, ambas en el término municipal de Bielsa. Excepto esta última, todas se han puesto de nuevo en funcionamiento con un contrato de operación adjudicado por la Confederación Hidrográfica del Ebro. Y ese será el camino que seguirá Lafortunada. A no ser que el Gobierno central tome la decisión de hacer nuevas concesiones, pero nada se sabe.

La central dejó de producir energía con el agua del Cinqueta, el río que recorre el valle de Chistau, en noviembre, cuando la última concesionaria, Endesa, entregó el sistema "en parada segura", como manda la norma, a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Ahora, el organismo de cuenca tiene que sacar un contrato de mantenimiento, que está "en tramitación", según informan, para retomar la actividad en el salto. Exactamente el mismo proceso que siguió con la central de Barrosa, dentro del sistema de la cabecera del Cinca. Y desde que la recibió hasta que anunció la reactivación pasó más de año y medio.

Por ello, los municipios afectados reclaman celeridad. Desde el Ayuntamiento de Plan han denunciado además que la falta de mantenimiento puede ocasionar problemas en la zona, ya que la presa de Plandescún está colmatada y modifica el cauce, en el que está previsto actuar. Recientemente, acordaron con la CHE la reubicación de la grava en unos 300 metros, que no deja de ser un encauzamiento. Desde allí, a través de Punta Llegar, el agua entra a la central mediante un túnel de 6.867 metros y 2.148 de canal hasta la cámara de carga, según los paneles informativos de Lafortunada.

El territorio, concretamente los ayuntamientos de Tella-Sin, Plan y San Juan de Plan, reclaman parte de los beneficios y compensaciones porque, entre otras razones, las instalaciones ocupan montes públicos por los que no cobran tasas de ocupación. Por ello, también acudieron a los tribunales, con el apoyo de la Diputación Provincial, y a sus reclamaciones ante la Justicia también se ha sumado la del Gobierno de Aragón.

Al Ayuntamiento de San Juan de Plan, en cuyo municipio de encuentra el Ibón de Sen, que forma parte del sistema del Cinqueta, no lo aceptan como parte. Los tres municipios han presentado un recurso de casación ante el Tribunal Supremo contra una sentencia de la Audiencia Provincial de noviembre, que desestima su petición de que los bienes que forman parte de la instalación, ubicados en sus montes de utilidad pública, reviertan a los municipios.

Los servicios jurídicos de la Diputación Provincial de Huesca, que asesoran a los ayuntamientos, confían en que el recurso sea admitido porque el criterio ahora es el interés "casacional" que pueda tener para crear una jurisprudencia y porque entienden que afecta al interés general local. No obstante, ya rechazó el del Ayuntamiento de Panticosa, por la central de El Pueyo de Jaca; y tampoco tuvo en consideración el de la central de Urdiceto (7,2 MW), en Bielsa.

Esta última, que entregó Acciona al Estado junto con la de Barrosa en febrero de 2018, no se ha puesto en marcha de nuevo. La CHE encargó un informe sobre su estado, pero no se han dado más pasos. Presentaba problemas de filtraciones, según el estudio de Francisco Galán, de la Fundación Esteyco, "Centrales Hidroeléctricas y Presas del Alto Aragón" (2012); y en invierno queda cubierta por la nieve, de forma que solo turbinaba en verano. Llama la atención que en 1932 se ideara este sistema que, como definen Ramón Lasaosa y Miguel Ortega en el libro "Miradas de Tella", "constituye un depósito de acumulación con sistema de bombeo, la primera instalación de este género que en su momento se había construido en España".

El sistema del Alto Cinca recoge todas las aguas de los cauces de Barrosa, Pinarra y Chisagüés con aportes de los ibones de Marboré, Trigoniero y, sobre todo Urdiceto, según las citadas fuentes, que iban a parar al embalse de Pineta, que tuvo que cambiar de ubicación. El Ayuntamiento de Bielsa ha denunciado en alguna ocasión la falta de documentación concreta sobre su construcción así como la necesidad de su limpieza por colmatación.

Las obras de construcción conllevaron la creación de muchas instalaciones en el entorno como fábricas de cemento, viviendas para empleados, barracones, una fábrica de pan, un matadero, un cuartel de la Guardia Civil, según datos a 31 de mayo de 1923, que se recogen en el citado libro de Lasaosa y Ortega. Las obras del salto del Cinca van avanzando y en 1930 empiezan las del Cinqueta, tras una propuesta de 1924. Con todo, la producción se vio afectada por el inicio de la Guerra Civil y la Bolsa de Bielsa, ya que quedó en manos de la 43ª División del ejército republicano hasta abril de 1938, cuando se retira la población civil. En 1939, se reanudó. No obstante, sobre este episodio hay versiones contrapuestas. En 1944, Hidroeléctrica Ibércia y Saltos del Duero se fusionan en Iberduero, empresa a la que perteneció durante décadas y las obras continuaron. La construcción de este sistema llevó el progreso en la zona en muchos aspectos, como la mejora de las comunicaciones, el desarrollo de pueblos como Lafortunada, donde antes sobre había dos casas, o la mejora de la economía de muchas familias, pero también un impacto ambiental. Por esos montes que ocupa, piden compensaciones al territorio.